Redacción / Energía a Debate
El Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) colabora en proyecto de investigación con el Imperial College London con el propósito de producir bioaceites y biohidrógeno a partir de biomasa (pasto/glicerol), empleando agua supercrítica en el proceso.
El IMP informó que este procedimiento puede tener aplicaciones para el mejoramiento de crudos pesados y para procesos de descontaminación ambiental, como tratamiento de aguas residuales, destrucción de residuos orgánicos peligrosos o el reciclado de PET.
El Instituto explicó que con las pruebas realizadas en la transformación de biomasa mediante el uso de agua supercrítica, se obtuvo entre 10 y 30 por ciento de biogás, mientras que el porcentaje de bioaceite llega a variar entre 50 y 70 por ciento; sin embargo, el bioaceite resultante de la reacción tiene un alto contenido de oxígeno y un valor calórico bajo.
Agregó que el proyecto también permitió evaluar catalizadores de hidrotratamiento y, a su vez, estudiar el efecto de los líquidos iónicos en la estructura de los catalizadores sintetizados y en su desempeño en las reacciones de producción de biocombustibles.
El IMP advirtió que el método con agua supercrítica también tiene desventajas, pues los materiales de los reactores se deterioran durante el proceso que, debido a las altas temperaturas y presiones, se vuelve peligroso.
Sin embargo, puntualizó, a pesar de los riesgos, la calidad del bioaceite se incrementó gracias a la acción de los líquidos iónicos durante la síntesis de los catalizadores.