Redacción / Energía a Debate (exclusivo)
El director general de Petróleos Mexicanos, José Antonio González Anaya, esbozó esta semana nuevas estrategias para impulsar la producción de crudo y para revertir el balance financiero negativo de la subsidiaria productiva del Estado, Pemex Transformación Industrial (TRI).
En una presentación en el marco del Expo Congress Energy Mexico 2017, el titular de Pemex comentó cuatro estrategias para impulsar la empresa productiva subsidiaria Pemex Exploración y Producción (PEP), incluyendo un nuevo modelo de contratos petroleros llamado Contratos de Servicios Integrales de Exploración y Producción (CSIEEs) para incentivar a los contratistas a producir más petróleo.
La primera de las cuatro acciones planteadas para fortalecer a PEP es concentrarse en asignaciones rentables para PEP, cambiando el régimen fiscal de las asignaciones que pierden dinero después de impuestos para poder continuar con su explotación.
Una segunda acción sería aplicar un programa agresivo de farmouts, consistente en alianzas en campos con alto riesgo, que requieren inversiones altas o para los cuales Pemex no cuente con la tecnología necesaria. Esto tendría el objetivo de aumentar la producción de crudo en un 15 por ciento.
Una tercera acción sería establecer una estrategia para alianzas en campos chicos, que implica instrumentar un proceso expedito para migrar 59 asignaciones con producción marginal.
Por último, González Anaya propuso una cuarta acción que consiste en un nuevo modelo de contratos conocido como Contratos de Servicios Integrales de Exploración y Producción (CSIEEs), mediante los cuales se pretende acelerar el desarrollo de asignaciones de Pemex a costos competitivos. El mecanismo, explicó, es que el contratista reciba una tarifa por barril que aumenta a medida que se incrementa la producción.
La estrategia de largo plazo para sanear a Pemex TRI hacia el año 2025 también se basa en cuatro acciones: (1) alianzas con particulares en operación y servicios auxiliares de las refinerías, (2) operación segura y confiable de las mismas, (3) reconocimiento y eficiencia en los costos de transporte, y (4) freno a los robos de producto.
El titular de Pemex estimó que, en ausencia de esas acciones, Pemex Transformación Industrial arrojaría un balance financiero negativo de 108.9 mil millones de pesos en flujo de efectivo en el 2025, cifra que se compara con un balance negativo estimado de 96.3 mil millones en 2017.
En cambio, al realizar esas cuatro acciones, el balance financiero de Pemex TRI será positivo en 29.4 mil millones de pesos en el 2025, según el cálculo presentado.
La primera de las cuatro acciones consiste en aprovechar las alianzas con el sector privado que ahora permite la Reforma Energética, para desarrollar las actividades auxiliares en refinación de petróleo crudo, como las relacionadas con el manejo del hidrógeno y agua en los procesos, así como para la reconfiguración y operación de las plantas. Con ello, se espera mejorar el balance en 41.9 mil millones de pesos.
La segunda acción planteada por González Anaya está orientada a una operación segura y confiable, mediante la atención oportuna de los factores de riesgo y la corrección del rezago en mantenimiento de las plantas, así como un manejo dinámico en los precios de los derivados del petróleo, obteniendo una mejora de 49.2 mil millones de pesos en el balance financiero.
La tercera etapa se refiere al reconocimiento y eficiencia en los costos de importación y transporte de combustibles, representando una mejora por 36.2 mil millones de pesos.
La cuarta y última, destacó, consiste en la custodia de ductos y terminales de almacenamiento y el combate al mercado ilícito de combustibles, con lo cual se obtendría una mejora de 11 mil millones de pesos en el balance.
Con estas cuatro acciones, se pretende revertir las pérdidas económicas y operativas de Pemex TRI y se obtendría un saldo positivo de 29.4 mil millones de pesos en el balance financiero al 2025.
González Anaya comentó que Pemex TRI ocupa actualmente la posición número 15 a nivel mundial con sus seis refinerías en el territorio nacional más la séptima que es una asociación con Shell en, Deer Park, Texas. En conjunto, esas refinerías cuentan con una capacidad de proceso de un millón 640 mil barriles diarios. Pemex TRI, además, cuenta con nueve centros procesadores de gas natural.