Redacción, con información de agencias
La mezcla mexicana de exportación (MME) de petróleo crudo tuvo una caída de 3.1% al cierre de la jornada de este jueves con respecto a su nivel inmediato anterior, al perder 1.95 dólares por barril (dpb) y quedar en los 60.25 dpb, un monto similar al que tuvo a mediados de abril pasado cuando presentaba una tendencia de recuperación desde 2020.
A principio de agosto, la MME se encontraba en los 67.15 dpb, de manera que en menos de un mes ha perdido 6,90 dpb; esto es, 10.2 puntos porcentuales por debajo de esa cotización.
Los crudos referenciales internacionales, West Texas Intermediate (WTI) y el Brent del Mar del Norte, también han ido a la baja, llegando a niveles menores de los últimos tres meses.
El WTI cotizó en 63.69 dpb y el segundo en 66.45 dpb, con un descenso continuo en las últimas tres jornadas.
Los analistas coinciden en que esta reducción de los precios internacionales del energético se debe principalmente a la desaceleración de la economía mundial, causada por la aparición de la variante Delta de la COVID-19.
La Agencia Internacional de Energía (AIE) justamente previó la semana pasada una reducción en el ritmo de la economía mundial y, por tanto, una menor demanda de petróleo especialmente por los grandes consumidores como China, esto por la expansión de la variante del coronavirus que ha demostrado ser más agresiva.
A esto se ha agregado la fortaleza que ha alcanzado el dólar norteamericano desde noviembre de 2020 frente a otras monedas, poniendo mayor presión a los “commodities” en los cuales Estados Unidos tiene dominancia, como el petróleo y algunos metales de uso industrial.