Redacción / Energía a Debate
Salina Cruz, Oaxaca – ?Tenemos un incendio controlado, no sofocado?, dijo anoche el director general de Petróleos Mexicanos, José Antonio González Anaya sobre el incendio que ocurrió la mañana de este miércoles en la casa de bombas de la refinería ?Ing. Antonio Dovalí?, ubicada en Salina Cruz, Oaxaca. El fuego se mantendrá hasta que se quemen los residuos aceitosos arrastrados por la lluvia hasta la zona de efluentes.
En conferencia de prensa, donde estuvo acompañado del gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, González Anaya afirmó que no se tiene confirmado ningún deceso, pero hay dos trabajadores desaparecidos y varias otras personas resultaron heridas. Pemex asume toda la responsabilidad de lo ocurrido, dijo el director de Pemex, quien se desplazó a la zona.
?El incendio no está sofocado, pero sí controlado, estamos trayendo refuerzos de equipos de Pemex y sus alrededores para dar una atención de calidad?, externó.
Este miércoles alrededor de la 08:50 horas, se registró una explosión ocasionada por un desbordamiento de presas de residuos causada un día anterior por las lluvias que provocó la tormenta Calvin a su paso por las costas oaxaqueñas. Según Pemex, se derramó aceite, mismo que alcanzó el punto de ignición, y una chispa eléctrica pudo haber causado el incendio. A raíz de lo ocurrido, 3 mil personas fueron desalojadas en la ciudad de Salina Cruz como medida preventiva, según informó la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA). También se emitió una advertencia a la población por “lluvia negra”.
La ASEA aseguró que está en coordinación con autoridades de los tres órdenes de gobierno para supervisar las acciones que se están realizando, las cuales consisten en la contención del incendio con espuma contra incendios, enfriamiento de los tanques, y despliegue de barreras oleofílicas en las instalaciones de la refinería.