La Comisión Federal de Electricidad (CFE) puede organizar mejor sus compras de gas y el internamiento del energético a territorio nacional, consideró la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en relación con la adquisición de plantas de generación eléctrica propiedad de Iberdrola por parte del Estado mexicano.
Esta mañana, Iberdrola informó que ayer domingo firmó el acuerdo vinculante con el fondo privado Mexico Infrastructura Partners (MIP), por el cual este último adquiere el 55 por ciento del beneficio bruto de explotación de los activos de Iberdrola México, filial de la empresa española en nuestro país.
Este porcentaje se traduce en 12 plantas de ciclo combinado más una central eólica que, en conjunto, tienen una capacidad instalada de 8 mil 500 megawatts (MW).
“Con esta operación, la CFE puede organizar mejor sus compras de gas y su internamiento a territorio nacional. Asimismo, tiene una excelente posición estratégica para participar, mediante las plantas adquiridas, en el crecimiento de este mercado”, expresó la Secretaría de Hacienda en un comunicado emitido esta tarde.
La dependencia, bajo el mando de Rogelio Ramírez de la O, señaló que el cierre de la operación entre Iberdrola México y el fideicomiso MIP se realizó a través de un vehículo de inversión nacional con participación mayoritaria del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin) de México y con financiamiento de la banca privada.
En opinión de Hacienda, esta acción da certeza legal al objetivo de la actual administración de recuperar el porcentaje de la generación de energía eléctrica que permita restablecer la soberanía energética, así como fortalecer las economías internas de la CFE, facilitándole el acceso al mercado del Noreste de 6 por ciento, antes de la operación, a 49 por ciento con esta transacción.
Esto, dijo, “en donde había perdido participación y donde se encuentran los clientes de más alto crecimiento”.
Cabe recordar que con la reforma a la extinta Ley Federal del Servicio Público de Energía Eléctrica de principios de la década de los 1990, se crearon cinco figuras legales que permitían a los privados acceder a participar en generación de energía y tener acceso a otras fuentes ajenas a la CFE, más accesibles y con mayor seguridad. Entre esas figuras aparecían las sociedades de autoabastecimiento.
Al amparo de esas modificaciones, diversas empresas privadas generadoras de electricidad, entre ellas Iberdrola, firmaron en sociedad con grandes consumidores, muchos de ellos industriales del Norte y Noreste del país.
Con la llegada de la reforma energética de 2013-2014, la figura del autoabastecimiento desapareció con la intención de que tanto generadores como sus socios emigraran al recientemente Mercado Eléctrico Mayorista (MEM).
Para Arturo Carranza, especialista en temas energéticos, la adquisición de las centrales eléctricas por parte del Estado mexicano conlleva una enorme responsabilidad para la CFE, comandada por Manuel Bartlett Díaz.
“Hay un hecho irrefutable que tiene que ver con el crecimiento de la demanda eléctrica. El consumo de energía eléctrica en los próximos diez años será de 2.9 por ciento anual”, citó el analista cifras del Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (PRODESEN) 2023-2037.
En este contexto, consideró, el hecho de que la CFE esté recuperando mercado implica una responsabilidad muy grande para esta empresa pública para garantizar el abasto de energía.
“El hecho de que la CFE esté de una u otra forma recuperando mercado a costa de la participación de los privados mete presión a esta responsabilidad de garantizar el acceso a la energía eléctrica”, insistió Carranza, quien es director de Proyectos de Energía en Akza Consultores.
Con todo, afirmó que la transacción entre Iberdrola y el Estado mexicano es buena para ambas partes.
“Iberdrola se queda con activos muy rentables y este acuerdo le va a ayudar a tener una relación más llevadera con las autoridades energética que le va a favorecer su negocio”, expresó.
También dijo que satisface el criterio con el cual el presidente toma sus decisiones en materia energética.