La producción de crudo de Petróleos Mexicanos (Pemex) no repunta a pesar de los apoyos que la administración federal ha canalizado, como parte de la estrategia orientada hacia su rescate.
En agosto pasado, la producción de aceite de Pemex cerró en 1 millón 580 mil barriles diarios (mbd), un aumento de 27 mil barriles, apenas 1.7 por ciento por arriba con respecto al mes anterior.
Sin embargo, desde diciembre de 2022, cuando bajó a 1 millón 556 mbd, la empresa al mando de Octavio Romero Oropeza no ha logrado alcanzar los 1.6 millones de barriles que, en promedio, mantuvo durante todo ese año, cuando cerró en un promedio anual de 1 millón 665 mbd.
Destaca el hecho de que con socios, desde abril pasado Pemex recuperó el ritmo que mantenía en 2022, ya que en ese mes pasó de 1.59 millones a 1.60 millones. En agosto cerró prácticamente en el mismo nivel.
(*/ Cifras a agosto de 2023. Fuente: Con información de Pemex)
Como parte de su Quinto Informe de Gobierno, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que la producción petrolera habría alcanzado 1.9 millones de barriles diarios, esto en la ruta hacia la meta de los 2 millones para el final de su mandato.
Al respecto, en su mensaje a la nación afirmó que se había logrado rescatar la actividad petrolera, con relación a la producción del crudo.
Por otra parte, de acuerdo con las últimas cifras de la empresa productiva del Estado, la producción de condensados disminuyó entre julio y agosto 5 mil barriles por día para quedar en los 277 mbd, el volumen más bajo en lo que va del año, pero manteniéndose en el nivel con el que comenzó en diciembre de 2022 cuando pasó de los 92 a los 241 mbd.
En total, la producción de hidrocarburos líquidos de Pemex –considerando aceite, con socios, condensados y líquidos de gas– llegó a los 2 millones 26 mbd, un aumento de 0.8 por ciento con respecto a julio y aún en la línea de los 2 millones que alcanzó en enero de este año.
(*/ Cifras a agosto de 2023. Fuente: Con información de Pemex)
Pemex definió recientemente los campos prioritarios para el periodo 2023-2037, entre los que se encuentran los ya considerados como tales: Quesqui, Ixachi, Ayatsil, Maloob, Cantarell, Zaap, Ku, Xanab, Tizon, Balam, Tekel, Itta, Yaxche, Tupilco, Racemosa, Tlamatini, Zama, Sukuum y Valeriana, entre otros.
La mayoría ha mantenido estable su producción en los últimos años y pocos, como Tupilco y Racemosa, la han incrementado marginalmente, mientras que otros, como Zama y Sukuum, por mencionar algunos, todavía no comienzan producción comercial.
En total, son 36 campos en los cuales recaerá el impulso a la producción petrolera para los próximos 15 años.
Respecto a los apoyos financieros, sobresalen las progresivas reducciones en el pago por Derecho por Utilidad Compartida (DUC) que la actual administración ha concedido a la empresa estatal.
Por este concepto Pemex pagaba antes de la presente administración un 65 por ciento, el cual se redujo a 58 por ciento en 2020 por instrucción presidencial. Un año después bajó a 54 puntos y en 2022 descendió a 40 por ciento.
Y en el Presupuesto de Ingresos de la Federación (PIF) 2024, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público plantea un impuesto por este rubro de 35 por ciento; esto es, que del monto original, el DUC habrá perdido 46 puntos porcentuales.
Lo anterior, siguiendo la línea del presidente López Obrador de dar todo el apoyo a la empresa sobre la base discursiva de su rescate.
Con todo, en los últimos años también Pemex no ha sido constante en el pago de este impuesto, según los reportes del Fondo Mexicano del Petróleo.
Aunado a lo anterior, en el lapso entre 2019 y junio de 2023, las finanzas públicas han destinado un total de 1.32 billones de pesos en recursos adicionales para la empresa, reveló recientemente el Instituto Mexicano para la Competitividad.