Juan Manuel Ávila Hernández*
(publicado en la edición julio-agosto 2017 de la revista Energía a Debate)
El 15 de diciembre del año pasado se publicó en el Diario Oficial de la Federación el manual de interconexión para centrales de generación con capacidad menor a 0.5 MW(1). Es sin duda un gran hito en la historia de esta naciente industria eléctrica privada en el país. Dicho manual especifica las modalidades y argumentaciones técnicas para interconectar lo que en el mercado le conocemos como generación distribuida y como más comúnmente se conoce como “paneles solares en los techos”. Aunado a la publicación anterior, el día 7 de marzo del presente año, también en el Diario Oficial de la Federación, queda publicado el esquema de contraprestaciones para dicha modalidad(2).
Hoy, gracias a lo mencionado en el párrafo anterior, se crea un verdadero cambio de paradigma en dos puntos específicos, consumo y generación, y esto se debe a que el hecho que los usuarios puedan generar a través de ellos mismos o de un tercero en el mismo si o donde consumen, los hace más conscientes en cómo ser más eficientes en su consumo eléctrico, además de que generan con energía limpia. Si bien es cierto que la ley nos habla de dos modalidades en generación distribuida, la limpia y la no limpia, por tema tecnológico, climático y de mercado, podemos ver como la opción más popular por el mexicano yace en la generación distribuida limpia, específicamente con la energía solar. Prueba de ello es el incremento en el número de contratos y potencia instalada en dicha tecnología, de 1 contrato de 3kwp en 2007 a 21,541 contratos a cierre del primer semestre de 2016 y más de 150 MW instalados(3). Más importante aún es mencionar que este incremento se da precisamente sin tener una reglamentación que impulse esta modalidad de negocio.
La pregunta que surge aquí es, ¿en qué beneficia la nueva reglamentación a dicho sector? Principalmente en darle esquemas de negocio a los consumidores y productores, o a la mezcla de ellos, pero la reglamentación va más allá, establece tiempos claros y precisos para las contestaciones por parte del distribuidor ?en este caso CFE? y tiempos límite para hacer la interconexión. Es de todos bien sabido que los tiempos de interconexión y la supervisión de la misma quedaba sujeta a las ya de por si saturadas cargas de trabajo de la misma CFE, aunado a las otras labores propias de la empresa, con lo que una interconexión podía pasar a meses enteros en espera. El día de hoy, la reglamentación es muy clara pues establece en el manual de interconexión para centrales de generación con capacidad menor a 0.5 MW en su capítulo quinto, en el punto 5.2.2, la tabla de tiempos y actividades para resolver una interconexión.
Esto nos dice que el distribuidor, en este caso CFE, cuenta con un plazo máximo de 18 días para realizar dicha interconexión, esto es, en caso de que ocupe una obra específica. No solo eso: un punto del que poco se ha hablado es la incursión de sistemas electrónicos y software que conllevan a la eficiencia y sobre todo a la transparencia.
La resolución emitida por la CRE el día 7 de marzo del presente año, en su capítulo tercero en el numeral 3.1 claramente especifica: “En apego a los principios de economía, celeridad, eficacia, legalidad, publicidad y buena fe, el Distribuidor contará con un plazo de trescientos sesenta y cinco (365) días naturales, para desarrollar una plataforma informática a través de internet que permita el completo manejo del proceso de interconexión, es decir, la elaboración, recepción, seguimiento, atención y emisión de aprobación de las solicitudes de interconexión. Lo anterior a fin de que se garantice un trato eficaz, uniforme y no indebidamente discriminatorio a todos los Solicitantes de interconexión de acuerdo con el proceso y los empos definidos en el manual de interconexión”.
La plataforma informá ca deberá permi r ser consultada para conocer las estadísticas de la integración de la Generación Distribuida a las Redes Generales de Distribución, incluyendo capacidad de los circuitos de distribución y la capacidad de generación interconectada a dichos circuitos, con el objeto de mostrar la capacidad disponible.
Una vez disponible la plataforma informá ca, deberá ser actualizada cuando menos cada 3 meses”(4).
Lo anterior le da certeza jurídica a los usuarios de poder tener una herramienta web que brinde información del mercado y trámites a cualquier individuo que desee informarse, además de poder darle seguimiento a las solicitudes y checar el status de las mismas.
No todo es miel sobre hojuelas. A pesar que la resolución de la CRE especifica que se cuentan con 30 días naturales para que entre en vigor la misma, los que estamos en el sector somos conscientes de los tiempos que esto se ha llevado, y en algunos casos ha habido reiteradas negativas a la recepción de dichas solicitudes, desconocimiento de varias oficinas de la misma CFE sobre las nuevas modalidades de net metering, net billing y venta total, y eso que el mercado se ha enfocado a iniciar con net metering ?cuya modalidad a diferencia de la regulación anterior incorpora la venta del saldo transcurridos 12 meses? una vez que los generadores y/o consumidores empiecen a optar por otras modalidades menos comunes como el net billing o la venta total habrá que ir aprendiendo todos los participantes (CFE y generadores) el camino para la integración de estas tecnologías, lo que me lleva a las siguientes obligadas preguntas; ¿Está México (como sociedad) preparado para dar un salto tan grande en la incorporación de dichas tecnologías? ¿Está la CFE preparada para poder incluir la futura demanda de estas modalidades?
Para resolver la primer pregunta, me remito a observar tres casos que directamente no se parecen a esto, pero sin duda alguna son igual de disruptivos que la generación distribuida a través de la energía solar: Uber, Netflix y Spotify. Si bien es cierto que en el caso de los tres se comercializa un intangible, un servicio, y en el caso de la energía solar un tangible ? ya sea la electricidad o el panel per se? se trata a final de cuentas de la incorporación de una nueva tecnología en nuestro día a día. Recuerdo perfectamente cuando incursioné a esta industria hace 5 años, la pregunta constante de la gente era: ¿sí funciona?, ¿a poco si pongo paneles genero luz?, entre otras muchas más preguntas que ponían en duda la viabilidad técnica de la tecnología. Al igual que hace 15 años era imposible pensar en un servicio de “streaming” de video o música, pues la velocidad del internet no lo permitía. Hoy la pregunta del consumidor yace en cuestiones que dejan claro que la tecnología está ya incorporada, como lo son precio, calidad y tiempo de entrega, mismas que se hacen en mercados donde dicha tecnología ya está por demás incorporada. Dicho lo anterior, podemos concluir que, en efecto, la sociedad mexicana está más que dispuesta para participar en un mercado de generación distribuida, especialmente uno con tecnología solar.
Para resolver la segunda pregunta, hay que tomar en cuenta que en teoría la CFE ha cambiado y ya no es una sola gran empresa, sino varias que se encargan de diferentes partes del mercado: generación, distribución, transmisión y suministro. En este caso, el área que debe estar preparada para aglutinar y atender todo lo referente a generación distribuida es CFE Distribución, a lo que la pregunta se aterriza en ¿CFE Distribución está preparada para poder incluir la futura demanda de estas modalidades? La respuesta a primera instancia es un sí a medias.
La red eléctrica, según las mejores prácticas internacionales, puede integrar entre un 15% y un 20% de generación distribuida. Mientras en México no llegamos ni al 1%, podemos pensar que la red eléctrica sin duda ene capacidad de incluir la generación distribuida. De ahí pasamos a si hay la infraestructura ?sobre todo de capital humano? dentro de la CFE para atender a estas nuevas modalidades y ahí es donde entramos en la discusión si se puede o no. La realidad es que distintas zonas de CFE trabajan con distintos parámetros y tiempos ? contrario a lo que uno pensaría?. Sin embargo, la generación distribuida y sus polí cas de integración es una de las tantas cosas que faltan por homologar dentro de la Empresa Productiva del Estado.
En conclusión, se puede vislumbrar un panorama primeramente optimista para la incursión de la generación distribuida en el mercado mexicano. Esto, sin duda alguna, conlleva a democratizar las metas de generación de energía limpia que tenemos como país, pues hacemos partícipes a todos y cada uno de los mexicanos en ellas, ya sea como generador o como prosumidor (una mezcla entre generador y productor). Los dos principales retos que se observan en la industria es la parte burocrática y de interconexión ?que tienen que ver directamente con CFE? y por otro lado de financiamiento ?que no es propia del sector sino del país en general?.
En el caso de este último, tenemos que estar atentos a la próxima legislación en materia de fintechs, pues sin duda son y serán de los primeros en incursionar en el fondeo de este mercado, a diferencia de la banca tradicional que siempre llega después a los nuevos mercados. Para muestra de ello ya existe un crowdfunding que se está volviendo bastante popular para fondear la instalación de paneles solares. Se trata de la empresa Girasol Empoderamiento Solar, quienes ya al menos han logrado colocar dos proyectos de manera exitosa en lo que va del año. En Aguascalientes, se acaba de inaugurar el primer centro comercial en México suministrado al 100% a través de generación distribuida con tecnología solar, todo lo anterior ya con un generador privado. Estas noticias sin duda alguna nos van marcando la pauta de hacia dónde se va a estar moviendo el mercado en los próximos meses y años.
Notas.
1. http://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5465576&fecha=15/12/2016
2. http://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5474790&fecha=07/03/2017&print=true
3. Información obtenida de la presentación hecha por el Comisionado Marcelino Madrigal en el “Aguascalientes Energy Forum” 1ero de Marzo de 2017.
4. http://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5474790&fecha=07/03/2017*Presidente de la Comisión de Energía de Coparmex ? Aguascalientes y CEO de Top Energy (juan.avila.hdz@topenergy.mx )