Motiva Enterprises informó que cerró su refinería en Port Arthur luego de los estragos provocados por la tormenta tropical Harvey, que continúa azotando la costa de Texas en el Golfo de México.
Se trata de la refinería más grande de Estados Unidos, que procesa 603,000 barriles diarios (b/d). Informó este martes que la refinería sufría restricciones en el flujo del petróleo que arriba y en la salida de productos, como la gasolina, a través de ductos y puertos.
Las inundaciones también han afectado el flujo de gasolina y de otros combustibles hacia la costa este a través de un oleoducto.
Motiva anunció que su refinería permanecerá cerrada hasta que se reduzca el nivel de agua, que actualmente tiene inundado toda la población de Port Arthur, según su alcalde, Derrick Freeman.
“Nuestra prioridad sigue siendo la seguridad de nuestros empleados y nuestra comunidad”, indicó en el comunicado.
Incluso antes del anuncio de Motiva, 10 refinerías en Texas, incluida la segunda más grande del país, operada por Exxon Mobil, habían cerrado desde que Harvey tocó tierra como huracán el viernes por la noche.