Braskem Idesa, compañía operadora del proyecto Etileno XXI en Nanchital, Veracruz, se deslindó hoy de toda acusación de irregularidades en sus actividades en México y, en particular, en su relación con Petróleos Mexicanos (Pemex).
Esta semana, en el contexto de las investigaciones que se siguen respecto a presuntos sobornos de la compañía Odebrecht a ex ejecutivos de Pemex, la petrolera dio a conocer el contrato de suministro de etano celebrado entre Pemex y Braskem Idesa, así como contratos firmados con Odebrecht, pero sin revelar los nombres de quienes los firmaron.
Debido a la reciente cobertura de los medios de comunicación, Braskem Idesa aclaró hoy que el acuerdo que firmó Braskem con el Departamento de Justicia de los Estados Unidos (U.S. Department of Justice) y la Comisión de Bolsa y Valores (Security & Exchange Commission, SEC) en diciembre de 2016 no contiene ningún informe ni reconocimiento de irregularidad alguna en relación con sus actividades en México, incluyendo también en lo que respecta al contrato de suministro de etano celebrado con Pemex.
Fundada en 2010, Braskem Idesa es una empresa mexicana formada por la asociación de Braskem (Brasil), la mayor compañía petroquímica productora de termoplásticos en el continente, y uno de los líderes en la petroquímica mexicana, Grupo Idesa. En conjunto desarrollaron un complejo petroquímico, enfocado en la operación y producción de etileno y polietileno de alta y baja densidad en el municipio de Nanchital, Veracruz. El proyecto requirió una inversión fija de 5.2 mil millones de dólares y produce 1,050,000 toneladas por año de etileno y polietilenos, el cual entró en operación en abril de 2016.
En 2010, Braskem Idesa celebró un contrato de suministro de etano con Pemex que fue parte del fundamento para atraer una inversión de más de 5 mil millones de dólares a México para que Braskem Idesa pudiese contribuir en la expansión la industria petroquímica mexicana. Dicho contrato fue garantizado mediante un proceso de licitación internacional realizado por Pemex con el apoyo operacional de Goldman Sachs en su representación y supervisado por el gobierno mexicano.
Como una parte vital de la cadena de suministro del sector manufacturero de México, la inversión en el proyecto de Braskem Idesa es un ejemplo tangible de la exitosa implementación de la estrategia de México para atraer inversiones a la industria manufacturera, señaló hoy la compañía.
El proyecto representa la mayor inversión industrial privada de México en los últimos 20 años y un importante hito para el desarrollo, la expansión y la competitividad de la industria del plástico Hecho en México; creándose nuevas materias primas, nuevos empleos, innovaciones, nuevas instalaciones de fabricación y la atracción de nuevos proveedores de servicios, agregando valor a los hidrocarburos de México.
En este mes de abril, Braskem Idesa está cumpliendo su primer año integral de inicio de operaciones. El complejo de Braskem Idesa tiene la capacidad de producir 1,050,000 toneladas de polietileno por año, lo cual proporciona a México una mayor base de producción nacional, reduce considerablemente la necesidad de que México tenga que importar polietilenos y promueve un creciente mercado de exportación para el plástico fabricado en México.