La petrolera británica BP Plc y la cementera mexicana Cementos Mexicanos SAB de CV (Cemex) firmaron un acuerdo no vinculante para ayudar a descarbonizar la producción y el transporte de cemento a medida que las compañías intentan avanzar en sus ambiciones contra el cambio climático.
Si bien recibe menos atención que el sector de petróleo y gas, la industria del cemento es un contribuyente importante al calentamiento global, siendo la responsable de aproximadamente un 7 por ciento de la contaminación de carbono a la atmósfera.
Las dos compañías están ampliando su red en la búsqueda de formas de reducir las emisiones. Su memorandum de entendimiento podría incluir soluciones como el uso de energía y transporte bajos en carbono, eficiencia energética, y compensaciones y captura de carbono.
El concreto “continuará teniendo un papel fundamental en una economía baja en carbono, y el desafío para la industria es encontrar soluciones a las emisiones en el proceso de fabricación”, dijo Juan Romero, vicepresidente ejecutivo de sostenibilidad, desarrollo comercial y de operaciones de Cemex.
Las compañías también tienen la intención de “desarrollar soluciones de urbanización para descarbonizar ciudades”.
BP se encuentra entre las varias empresas europeas que el año pasado establecieron objetivos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. La empresa de energía con sede en Londres planea reducir su producción de petróleo y gas en un 40% para el final de la década y aumentar las inversiones en energías renovables. Cemex tiene la ambición de ofrecer concreto con cero emisiones netas a nivel mundial en 2050.