Ulises Juárez / Energía a Debate
La continuación en las políticas energéticas de la administración actual inevitablemente resultará en un incumplimiento de las metas de energía limpia comprometidas por México, asegura de manera preliminar la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
El organismo planteó dos escenarios –conservador y realista– con base en datos estadísticos de los proyectos de generación limpia y sus fechas de entrada en vigor para analizar la efectividad del mecanismo de los Certificados de Energía Limpia (CEL) en el cumplimiento de las metas de energía limpia.
El primero contempla que todos los proyectos programados en los instrumentos de planeación del sector, concretamente el Programa de Desarrollo del Sistema Eléctrico Nacional (PRODESEN) 2018-2032 y PRODESEN 2019-2033, así como el Programa Indicativo para la Instalación y Retiro de Centrales Eléctricas (PIIRCE) 2019-2033, entran en operación conforme está especificado en ellos.
En el escenario realista se estiman cancelaciones y retrasos de proyectos como resultado de las políticas y regulaciones recientemente implementadas por la Secretaría de Energía (Sener) que han generado incertidumbre y dificultan la competencia en la industria eléctrica.
De acuerdo con los dos escenarios, la Cofece concluyó que, en el realista, en 2022 y 2023, los CEL apenas alcanzarían para cubrir los requisitos y, para 2024, prevé un faltante de 12 millones de Certificados.
En el mismo sentido, a la empresa productiva subsidiaria de la Comisión Federal de Electricidad, CFE Suministro de Servicio Básico (CFE SSB), le faltarían 10 millones de CEL en 2022 para cumplir con sus obligaciones según el escenario conservador y 11 millones en el realista. Para 2024, agregó, el faltante sería de 16 millones y 20 millones, respectivamente.
Por ello, señaló, a partir de 2022 México incumpliría sus metas de energía limpia con un faltante de 0.8% de generación limpia, mientras que para 2024 dicho faltante llegaría al 5.2%, por lo que el país no alcanzaría el 35% de su generación total a partir de fuentes renovables.
Estas cifras están expuestas en el documento “Transición hacia mercados competidos de energía: Los Certificados de Energías Limpias en la industria eléctrica mexicana”, en su versión preliminar emitida para consulta pública.
La Cofece explicó que la elaboración del documento es parte del proceso de evaluación de la competitividad del mercado de los CEL, prevista en el artículo vigésimo segundo transitorio de la Ley de Transición Energética, y retoma las respuestas al cuestionario abierto el público sobre el documento relativo al mercado de los Certificados que se puso a disposición en el sitio oficial de la Cofece el 19 de marzo de 2020.
En virtud de lo anterior, la Cofece está sometiendo este documento a los comentarios del público, “por lo que no debe entenderse como una versión final del documento que el Pleno de esta Comisión emitirá en su momento”, precisó.
Entre los aspectos regulatorios que reducen la oferta de CEL, la Cofece expone las modificaciones a los criterios para otorgarlos a plantas generadoras que operaban antes de 2014; los retrasos en el otorgamiento de permisos de generación, y la falta de inversión en la expansión y modernización de la Red Nacional de Transmisión y las Redes Generales de Distribución eléctricas.
Asimismo, la falta de actualización en la metodología de cálculo de las tarifas reguladas; el impacto del incremento en la participación de fuentes limpias en la estabilidad del Sistema Eléctrico Nacional (SEN); las implicaciones de la Política de Confiabilidad, Seguridad, Continuidad y Calidad en el SEN, y la disminución de incentivos para la generación distribuida limpia, son los otros factores regulatorios que han reducido la oferta de Certificados.
Destaca la cancelación de las subastas eléctricas de largo plazo por parte de la actual administración y la falta de regulación relativa al mercado eléctrico de corto plazo como factores que han impedido la comercialización de los CEL.
“Para que el mercado de CEL funcione en condiciones de competencia es necesario asegurar cuatro principios básicos”, propuso la Comisión.
Primero, por el lado de la demanda de CEL, garantizar la competencia en el eslabón de comercialización con más agentes económicos, lo que aumentaría el número de sujetos obligados al cumplimiento de CEL incrementando su demanda y favorecería una mejor distribución de las obligaciones, hoy concentradas en el principal suministrador, CFE SSB.
Segundo, por el lado de la oferta, garantizar competencia en generación de electricidad, lo que fomenta la instalación de más centrales con derecho a recibir Certificados incrementándose así el número de CEL ofrecidos en el mercado.
Tercero, en cuanto a la comercialización, es necesario asegurar la implementación de los mecanismos previstos en la normativa para el intercambio de CEL, en especial operar el mercado de corto plazo y retomar las subastas de largo plazo.
Finalmente, en cuanto al monitoreo, es necesario aplicar efectivamente los mecanismos de vigilancia y sanción previstos en la norma para que los Participantes Obligados tengan los incentivos suficientes para la compra de CEL y cumplimiento de sus obligaciones en materia de energías limpias.
Para consultar el documento preliminar, visite la página de la Cofece y envíe sus comentarios mediante el formulario disponible en la propia página, o envíelos a certificadosenergia@cofece.mx