El Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional firmó dos acuerdos de préstamo por separado de 20 millones de dólares (mmdd) con ACWA Power para apoyar la construcción y operación del parque eólico Dzhankeldy de 500 MW y la planta de energía eólica Bash de 500 MW en la región de Bukhara, Uzbekistán.
Las nuevas instalaciones impulsarán la capacidad de generación de energía renovable, reducirán las emisiones de gases de efecto invernadero y diversificarán la matriz energética del país, expuso el Fondo el martes de esta semana.
El Fondo, perteneciente a la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), dijo que el financiamiento del parque Dzhankeldy apoyará para su construcción, operación y mantenimiento, así como para el desarrollo de una infraestructura de transmisión de 128 kilómetros (km).
De acuerdo con el plan, la planta generará 1 mil 550 gigawatts por hora (GWh) al año.
Por su parte, la central eólica de Bash generará anualmente más de 1 mil 650 GWh e incluirá la construcción e instalación de 160 km de líneas de transmisión.
Combinadas, ambas plantas reducirán las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en 1 mil 800 millones de toneladas.
La Fundación OPEP explicó que los dos paquetes de préstamos fueron financiados a través de un consorcio de prestamistas internacionales, con el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD), actuando como banco técnico, y Standard Chartered Bank como banco de documentación.
Los otros miembros del consorcio son el financiador de desarrollo francés Proparco, el banco de desarrollo alemán Deutsche Investitions- und Entwicklungsgesellschaft (DEG), el Banco Industrial y Comercial de China y el Banco Asiático de Desarrollo (ADB).
“El aumento de la participación del sector privado es clave para apoyar la ambiciosa transición energética de Uzbekistán. Estamos felices de cooperar con las autoridades, así como con nuestros socios de desarrollo y del sector privado en proyectos del sector energético que aumentarán la participación de las energías renovables en la generación de energía y proporcionarán energía limpia confiable y asequible”, expresó Abdulhamid Alkhalifa, director general del Fondo OPEP.
Localizado en Asia Central, al Este del Mar Caspio y al sur de Kazajstán, Uzbekistán es uno de los países más intensivos en energía del mundo. El gobierno prevé que la demanda de electricidad se duplique para 2030.
Para satisfacer esta creciente demanda de energía y mitigar los riesgos de seguridad climática y energética, el país planea agregar capacidades de energía eólica de 3 GW y solar de 5 GW a su canasta energética, refirió el Fondo.
En la última década, Uzbekistán ha introducido una serie de reformas para descarbonizar y liberalizar el sector energético y crear un entorno propicio para la inversión del sector privado, agregó.
Respecto a ACWA Power, es un desarrollador y operador internacional de instalaciones de generación de energía y desalinización de agua con sede en Arabia Saudita. En2021, este desarrollador firmó un acuerdo de compra de energía (PPA) por 25 años con la empresa uzbeka NEGU del proyecto eólico Nukus de 100 MW de capacidad.
El Fondo OPEP y ACWA Power han cooperado previamente en proyectos energéticos en Jordania (Zarga), Egipto (Kom Ombo) y Uzbekistán (Sidarya).
Hasta la fecha, el Fondo OPEP para el Desarrollo Internacional ha proporcionado cerca de 600 millones de dólares en financiamiento del sector público y privado en apoyo de la agenda de crecimiento sostenible de Uzbekistán en línea con su estrategia de asociación con el país.
El Fondo es la única institución de desarrollo con mandato mundial que proporciona financiamiento de países miembros de la OPEP a países no miembros exclusivamente. La organización trabaja en cooperación con socios de países en desarrollo y la comunidad de desarrollo internacional para estimular el crecimiento económico y el progreso social en países de bajos y medianos ingresos de todo el mundo. De acuerdo con información del propio Fondo, a la fecha ha comprometido más de 24 mil millones de dólares en proyectos de desarrollo en más de 125 países con un costo total estimado de 187 mil millones.