La empresa de logística danesa Maersk bautizó con el nombre de “Laura Maersk” al primer buque transportador de contenedores impulsado con metanol, un combustible alternativo y limpio para motores de combustión interna.
La presidenta de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, fungió como madrina del buque y en una ceremonia celebrada en el puerto de Copenhague, Dinamarca, bautizó al navío rompiendo una botella de champagne en la proa.
“‘Laura Mærsk’ es un hito histórico para el transporte marítimo en todo el mundo. Muestra el espíritu emprendedor que ha caracterizado a Maersk desde la fundación de la empresa. Sin embargo, lo más importante es que este barco es una prueba muy real de que cuando nosotros, como industria, nos unimos a través de esfuerzos y asociaciones, surge un camino tangible y optimista hacia un futuro sostenible. Este nuevo barco ecológico es el gran avance que necesitábamos, pero aún nos queda un largo camino por recorrer antes de llegar a cero emisiones”, afirmó en el acto Vincent Clerc, CEO de Maersk.
La empresa aseguró que tiene un ambicioso objetivo para 2040 de cero emisiones netas de gases de efecto invernadero y pretende transportar un mínimo del 25 por ciento de la carga oceánica utilizando combustibles verdes para 2030.
Consideró que el buque tipo “feeder” de 2 mil 100 TEU (contenedores equivalentes a veinte pies) es un paso importante hacia el objetivo a largo plazo de renovar gradualmente toda la flota de Maersk para operar únicamente con combustibles ecológicos.
La firma adelantó que tiene 24 buques de metanol adicionales encargados para entrega entre 2024 y 2027, además de que aclaró que su política consiste en pedir únicamente buques nuevos que vengan con una opción de combustible ecológico.
En el acto, celebrado el jueves de esta semana, estuvo también presente Robert Uggla, presidente de Maersk.