Margarita Jasso Belmont
Los miembros del grupo ampliado de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y aliados (OPEP+) acordaron reducir su producción colectiva en dos millones de barriles por día, lo que representó el mayor recorte hecho desde el año 2000.
La decisión de la OPEP+ busca detener la caída de los precios del petróleo provocada por una debilidad en la economía mundial, medida que reactivó las tensiones con Estados Unidos.
Previo a la medida acordada por el organismo, algunos de sus miembros ya habían decidido limitar sus niveles de producción, ante la coyuntura económica global que incluye una elevada inflación por altos costos energéticos.
El recorte de la OPEP+ entrará en vigor a partir de noviembre próximo y se mantendrá hasta finales de 2023.
Esta condición se mantendrá así, a menos de que cambien las condiciones del mercado, aseguró Abdulaziz Bin Salman, ministro de Energía de Arabia Saudita, uno de los países con la mayor producción de petróleo en el mundo.
Por separado, el ministro de Estado de Recursos Petroleros de Nigeria, Timipre Sylva, mencionó que la intención del pacto es que los precios del barril de petróleo se ubiquen alrededor de 90 dólares, pues si se ubica por debajo, el riesgo es que algunas economías se desestabilicen.
Rechazo por parte del gobierno de EU
Luego de que se diera a conocer la decisión de la OPEP+, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mostró rechazo y dijo sentirse decepcionado por la decisión, ya que considera que dañará a la economía global.
Por el contrario a lo que se aprobó, Biden optaba desde hace tiempo en que la OPEP+ debía aumentar su producción.
Para contrarrestar la medida de la OPEP, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y el director del Consejo Económico Nacional, Brian Deese, anunciaron que EU liberará 10 millones de barriles de petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo en noviembre para proteger a los consumidores de ese país y con ello promover la seguridad energética.
En la víspera de la decisión de la OPEP+, los precios del petróleo subieron tres por ciento, pues ya se tenía la expectativa de un recorte significativo.
Es así que el martes 4 de octubre, el petróleo Brent aumentó 3.31 por ciento, lo que significó una ganancia de 2.94 dólares, para cerrar en 91.80 dólares el barril.
En tanto que el crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) subió 3.03 por ciento, a 86.15 dólares.