Los desarrolladores y productores de gas natural licuado (GNL) de América del Norte han llegado este año a acuerdos para vender 48 millones de toneladas al año (MTPA) de gas, lo que eventualmente impulsará las exportaciones en un 60 por ciento desde los niveles actuales, aunque gran parte de la producción aún está a años de distancia, informó este jueves The Yucatan Times.
Agregó que la demanda de GNL se está disparando a medida que el conflicto en Ucrania empuja los precios globales a su nivel más alto en al menos 14 años.
Por ello, los compradores en Europa han volteado hacia Occidente en un alejamiento del gas ruso, mientras que los compradores chinos están logrando acuerdos a largo plazo después de una pausa.
Recordó que se están desarrollando nuevas plantas de exportación de gas en los Estados Unidos, en tanto que México y Canadá están preparados para unirse como importantes exportadores de gas, con plantas propuestas para sus costas occidentales.
México actualmente cuenta con tres terminales de recepción y gasificación en su costa occidental al Pacífico, que son Energía Costa Azul, en Baja California, propiedad de Sempra Energy, y Manzanillo, Colima, del consorcio KMS, además por supuesto de la terminal de Altamira, Tamaulipas.
Mediante la empresa estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE), la actual administración federal ha firmado alianzas con empresas privadas para el desarrollo de por lo menos proyectos de GNL en los puertos de Topolobampo, Sinaloa; Salina Cruz, Oaxaca, y uno más pero menos probable en la Península de Yucatán.
En julio de este año, la CFE anunció las alianzas con las empresas Infraestructura Energética Nova (IEnova) y New Fortress Energy, aunado al acuerdo con Vista Pacífico para la terminal de Topolobampo.
Estos proyectos incluyen la expansión del sistema de gasoductos para la internación del gas a partir de las terminales.
The Yucatan Times también refirió que se están construyendo ocho terminales de exportación de GNL en América del Norte y más de una docena más podrían recibir luz verde financiera para 2023. Algunos compradores han bloqueado suministros de plantas que aún no han sido aprobadas para la construcción, por lo que es posible que no todos los acuerdos de suministro se lleven a cabo, aclaró.
“La dinámica ha cambiado”, dijo Charlie Riedl, director ejecutivo del grupo comercial Center for Liquefied Natural Gas. “Los compradores están tratando de cerrar acuerdos firmes en los que puedan garantizar que se entregará el gas”, agregó citado por el diario.
Esta semana, los precios del gas en Europa alcanzaron los 84 dólares por millón de unidades térmicas británicas (mmBtu) y los futuros de gas de EE UU superaron el martes los 10 dólares por mmBtu por primera vez desde 2008.
Un papel de largo plazo
Goldman Sachs pronostica que la demanda global de GNL aumentará alrededor de un 12 por ciento, 424 MTPA, el próximo año y espera que se aprueben nuevas plantas que suministrarán 156 MTPA dentro de los próximos cinco años, expuso el diario.
La creciente demanda ha convertido a Estados Unidos en la mayor nación exportadora de GNL de este año durante los primeros seis meses. Los proyectos aprobados que se espera inicien envíos entre 2023-2026 podrían mantener al país en el primer lugar.
“Es importante que Estados Unidos abastezca el mercado para apoyar a los aliados en Europa y Asia y mejorar la capacidad del mundo en desarrollo para acceder al gas”, dijo Mike Sabel, director ejecutivo de Venture Global LNG. Su firma ha firmado acuerdos para vender 18,5 MTPA de GNL desde septiembre pasado.
Algunos de los acuerdos más importantes son de empresas chinas que regresan al mercado estadounidense después de una pausa por disputas arancelarias. A fines del año pasado, Venture Global LNG llegó a acuerdos por 11 MTPA con unidades de Sinopec de China y CNOOC Ltd. ENN Natural Gas de China firmó acuerdos separados el año pasado con Cheniere Energy y Energy Transfer.
Esta última, además, apenas esta semana firmó un acuerdo de suministro de GNL a 20 años con Shell para su planta de exportación de gas a ubicarse en Lake Charles, Louisiana.
El diario también expuso que, debido a la falta de capacidad disponible, algunos acuerdos recientes involucraron instalaciones cuya construcción aún no ha recibido aprobaciones financieras. Esos acuerdos “refuerzan nuestra convicción en el papel a largo plazo” del GNL en los mercados energéticos mundiales, dijo Tim Wyatt, vicepresidente senior de Cheniere.
Pero el aumento de la demanda ha llevado a la construcción de tres nuevos proyectos de exportación de EE UU y varios más podrían aprobarse en 2023.
“La crisis energética mundial ha tardado años en gestarse debido a una importante falta de inversión”, dijo Octavio Simoes, director ejecutivo de Tellurian, que recientemente comenzó la construcción de su planta en Luisiana, que se retrasó durante mucho tiempo.