La Comisión Reguladora de Energía (CRE) aprobó a 15 centrales eléctricas bajo las modalidades de autoabastecimiento y cogeneración el aprovechamiento de la energía que produzcan, todas ellas de Iberdrola México, entre las que se encuentran aquellas que había vendido este año a un fideicomiso privado con participación gubernamental.
En sesión extraordinaria celebrada este mediodía, el órgano de gobierno de la CRE autorizó la modificación de la condición relativa al aprovechamiento de energía eléctrica generada por las centrales de autoabasto y de cogeneración propiedad de la firma.
Estas centrales son:
Iberdrola Energía Monterrey; Parques Ecológicos de México; Iberdrola Energía La Laguna; Iberdrola Energía Tamazunchale, e Iberdrola Energía Monterrey, Central Dulces Nombres II.
También están PIER Quecholac Felipe Ángeles; Eólica Dos Arbolitos; Parque Industrial de Energía Renovable; PIER IV, e Iberdrola Energía del Golfo.
Asimismo, en la lista aparecen Iberdrola Energía Altamira; EnerTek; Iberdrola Cogeneración Ramos; Iberdrola Cogeneración Altamira, e Iberdrola Cogeneración Bajío.
Cabe recordar que en junio de este año, el gobierno de México y el fondo privado Mexico Infrastructure Partners (MIP) firmaron un acuerdo para la adquisición de 13 plantas mayoritariamente de ciclo combinado de la empresa de origen español.
Como resultado de esta operación, en la que participó el Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN) del gobierno federal, se solucionaron algunas controversias que había mantenido la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador con Iberdrola México.
Fue el caso, por ejemplo, de la central eólica de Santiago, en Guanajuato, a la cual la CRE liberó el premiso de generación eléctrica que le había mantenido detenido.
La central de la empresa Iberdrola Energía Bajío tenía negado el permiso de generación desde mayo de 2022.
La central de autoabastecimiento Dulces Nombres de Iberdrola Energía Monterrey (Nuevo León) también había sido objeto de controversia entre autoridades y la firma ibérica, por lo que la CRE le había retirado el permiso de generación y le había negado en reiteradas ocasiones el permiso modificatorio sobre el aprovechamiento de energía eléctrica.
Además, la CRE impuso una multa por 9.1 millones de pesos a Iberdrola Energía Monterrey por presuntamente haber vendido energía eléctrica a empresas cuyos nombres no se encontraban en su permiso de autoabasto. La empresa recibió en octubre de este año la confirmación de la suspensión definitiva en contra de esta sanción.