Todos los días se ven en las noticias eventos en los que se observan los efectos del cambio climático, desde el incendio en el Amazonas hasta el derretimiento de los polos. Como sociedad es importante considerar que estamos en el punto de inflexión en el que sus efectos pueden ser mitigados y contrarrestados.
El Acuerdo de Paris fijó una serie de metas (no vinculantes) para los países participantes en reducción de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) a través de la mitigación, adaptación y resiliencia de los ecosistemas. La aplicabilidad de este inició en 2020, una vez terminando el protocolo de Kioto.
Las acciones concretas que busca este Acuerdo son:
- Mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de 2 °C con respecto a los niveles preindustriales y proseguir los esfuerzos para limitar ese aumento de la temperatura a 1,5 °C con respecto a los niveles preindustriales, reconociendo que ello reduciría considerablemente los riesgos y los efectos del cambio climático;
- Aumentar la capacidad de adaptación a los efectos adversos del cambio climático y promover la resiliencia al clima y un desarrollo con bajas emisiones de gases de efecto invernadero, de un modo que no comprometa la producción de alimentos;
- Elevar las corrientes financieras a un nivel compatible con una trayectoria que conduzca a un desarrollo resiliente al clima y con bajas emisiones de gases de efecto invernadero.
En México el principal emisor de GEI es el sector transporte y en segundo lugar se encuentra el sector eléctrico. Ahí radica la importancia de la Reforma Energética de 2013,que establece que el Sector Eléctrico tiene Obligaciones en materia de Energías Limpias y de Reducción de Emisiones.
Por lo que en las diferentes leyes secundarias como son la Ley General de Cambio Climático y la Ley de Transición Energética, se establecieron metas de generación con Energías Limpias, quedando como 35% para 2024.
Es por lo anterior que se buscaron mecanismos de mercado que permitan generar nuevas inversiones en Energías que contribuyan a la disminución de las emisiones de GEI, particularmente en Energías Limpias. Los Certificados de Energías Renovables o Limpias son mecanismos de mercado que permiten que los proyectos o las Centrales Eléctricas generadoras obtengan una ganancia adicional a la venta de Energía, que permita recuperar las inversiones en un menor tiempo, aunado a que le dan trazabilidad a la energía consumida con el objeto de poder demostrar atributos ambientales y dar cumplimiento a metas particulares.
Cabe señalarse que las metas establecidas no implican el incremento de la generación a partir de cero, es decir, México partió de una base de generación limpia considerando las Centrales Eléctricas de la CFE Hidroeléctricas, Nuclear, Geotérmica y la generación privada que inicio operaciones antes de agosto de 2014, como son los autoabastos.
Para este efecto, los Certificados de Energías Limpias (CEL) son el instrumento derivado de la Reforma Energética de 2013 que impulsaría el desarrollo de nuevas fuentes de generación renovables o limpias, este Certificado permite acreditar los atributos ambientales de un MWh generado con Energías Limpias y cuya finalidad es contar con una forma de certificar que la energía que se está consumiendo proviene de fuentes limpias o renovables.
Considerando diferentes instrumentos en el mundo, los CEL contemplan una gran gama de tecnologías que en otros países no son considerados como renovables.
La Comisión Reguladora de Energía (CRE) es la encarga de otorgar y contabilizar los CEL que reciben las centrales eléctricas limpias, a través del Sistema de Gestión de Certificados y cumplimiento de Obligaciones de Energías Limpias (S-CEL). Este sistema se encuentra en operación desde 2018 y a junio de 2021 se han otorgado 57,323,433 certificados.
Asimismo, las metas de Energía Limpia se convierten en metas individuales para los participantes Obligados, derivado del requisito publicado por la Secretaría de Energía, por el cual los grandes consumidores de Energía están obligados a cumplir con un porcentaje de CEL. Los Participantes Obligados deben cumplir a través del S-CEL con las Obligaciones.
Las Subastas de Energías Limpias permitieron el desarrollo de nuevas Centrales Eléctricas Limpias que, además de vender la energía para el consumo de CFE a precios competitivos (la tercera subasta obtuvo los precios más bajos registrados a nivel mundial), entregarían los CEL a empresa pública para que pudiera cumplir con sus Obligaciones en materia de Energías Limpias.
Con las 3 Subastas de Largo Plazo celebradas se logró la construcción de varias Centrales Eléctricas que entraron en operación a partir de 2018 y hasta 2021, asegurándose contratos de venta de Energía y Potencia por 15 años, y por 20 años para los CEL.
Respecto a la contrarreforma propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador que elimina los CEL al considerar que la CFE no recibe estos certificados por su generación, cabe señalarse que:
En términos de la regulación vigente, las Centrales Eléctricas Legadas (que pertenecen a CFE) pueden recibir CEL bajo las siguientes condiciones:
- Hayan entrado en operación después del 11 de agosto de 2014.
- Hayan incrementado su generación después del 11 de agosto de 2014.
De la misma manera, las Centrales provenientes de las Subastas de Largo Plazo deben entregar la totalidad de los Certificados de Energías Limpias comprometidos a CFE Suministro Básico (único comprador por las primeras dos subastas y uno de los compradores en la tercera). Con esto CFE podría ser capaz de cumplir con sus Obligaciones en materia de Energías Limpias.
De acuerdo con la CRE, se han otorgado CEL a varias Centrales de CFE como son: la central nucleoeléctrica Laguna Verde, los Azufres y los Húmeros (centrales geotérmicas), además de que hay varias centrales que pudieran cumplir con estos criterios, como es Cogeneración Salamanca.
Asimismo, las Centrales Hidroeléctricas pertenecientes a la CFE pudieran ser susceptibles de recibir CEL si cumplen con los criterios para considerarse como Energía Limpia (densidad de potencia superior a 10 W/m2) y, si demuestran incrementos en generación con respecto a los últimos 3 años, entonces podrán recibir los CEL.
Dentro de los Programas de Desarrollo del Sistema Eléctrico y en las conferencias mañaneras dadas por el presidente se ha mencionado la intención de rehabilitar las Centrales Hidroeléctricas, incrementando de manera sustancial su generación, lo que implicaría que podrían recibir los CEL correspondientes a esta generación.
Considerando los consumos del SEN establecidos en el PRODESEN 2021-2035 y dando un 70% del consumo a CFE Suministro Básico se tienen los siguientes números:
De lo anterior se puede establecer que la CFE podría contar con los Certificados necesarios de sus Centrales Eléctricas y de las Subastas de Largo Plazo para cumplir con sus Obligaciones. Es importante considerar que después del 2022 es difícil de predecir si se contarán con ellos, dado que ya no existirán Centrales eléctricas con contrato de Subasta de Largo Plazo. En este sentido será importante establecer estrategias para dar cumplimiento a estas Obligaciones.
Cabe señalarse que los CEL no tienen vigencia, es decir que los CEL generados en 2021 pueden ser utilizados en 2022 y así sucesivamente.
Los Certificados de Energías son un instrumento que ayudará a la Transición Energética del País, además de poder dar certeza al extranjero sobre las intenciones de México para contribuir a la reducción de gases de efecto invernadero y, por ende, a la temperatura global.
*Alberto Campos obtuvo su título como Ingeniero Químico con especialidad en Procesos en la Universidad de las Américas Puebla, en el año 2005; y, realizó un master en Ing. Ambiental y Tecnología con la Universidad Europea Miguel de Cervantes de España, concluyéndolo el año 2013. Tiene un Diplomado en Evaluación de Proyectos de Inversión por el ITAM y uno en Derecho Energético por la Universidad Autónoma Metropolitana. Tiene experiencia en el diseño de procesos en los sectores público y privado trabajando en diferentes empresas desarrollando proyectos de cogeneración y Energías Limpias, así como en proyectos de hidrocarburos. Se desempeñó como Director de Área en la Comisión Reguladora de Energía en la Unidad de Electricidad, trabajando en el desarrollo e implementación del Sistema de Gestión de Certificados y Cumplimiento de Obligaciones de Energías Limpias (S-CEL), así como en el desarrollo de la regulación necesaria para la operación del Mercado Eléctrico Mayorista. Desempeñó como Consultor independiente en materia de Energía, particularmente en Energías Renovables y Mercado Eléctrico Mayorista. Actualmente es Sr. Energy Manager en Edison Energy, enfocándose en temas regulatorios, de cumplimiento de metas ambientales y comerciales.