Petróleos Mexicanos (Pemex) pagó 10.8 millones de dólares (mmdd) más por importaciones de gas natural en mayo con respecto al mes anterior, lo que significó un incremento de 49.3 por ciento.
En abril pasado, la petrolera desembolsó un total de 21.9 mmdd por internar el energético al país, cifra que aumentó a 32.7 millones al mes siguiente.
Con todo, estos montos son los más bajos en lo que va de 2023 y muy inferiores a los valores de los dos años anteriores, cuando se ubicaron en una banda de entre los 60 y más de 800 millones de dólares, esta última cifra rebasada en febrero de 2021.
(Con información de Pemex)
En términos de volumen, la empresa a cargo de Octavio Romero Oropeza aumentó en 32.6 por ciento las importaciones de gas entre meses, pasando de los 293.2 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) promedio, a los 389 mmpcd; esto es, una diferencia de 95.8 millones de unidades.
El aumento en las importaciones compensó el descenso en la producción de la petrolera, la cual cayó en 65 mmpcd, con socios, y en 64 mmpcd, sin socios. En ambos casos, la baja fue de 1.2 por ciento.
Con socios, Pemex produjo 5 mil 30 mmpcd, en tanto que sin socios el volumen llegó a los 4 mil 963 millones para mayo.
(Con información de Pemex)
La administración federal está dando un mayor impulso al gas natural principalmente para la generación eléctrica, pero también para ampliar las zonas de consumo y alimentar a la nueva refinería “Olmeca”, ubicada en el Puerto de Dos Bocas, Tabasco, a inaugurarse la segunda etapa de su construcción este sábado primero de julio.
Entre los proyectos para ampliar la cobertura del energético se encuentra el proyecto Puerta al Sureste, bajo la construcción y operación de la canadiense TC Energía, que continuará el gasoducto existente Sur de Texas – Tuxpan hacia Dos Bocas y, de ahí, a dos centrales de generación eléctrica de ciclo combinado en la Península de Yucatán.
De acuerdo con el plan, la ampliación de este ducto marino tendrá una capacidad de transporte de 1 mil 300 millones de pies cúbicos diarios en un tramo de 715 kilómetros.
El gasoducto Puerta al Sureste también proveerá de gas a la empresa norteamericana New Fortress Energy que recientemente recibió el permiso para licuarlo y exportarlo mediante buque a Europa y posiblemente a Asia.
El volumen de gas que movería la empresa aún no ha sido revelado.
Igualmente, el gasoducto Puerta al Sureste alimentará a los proyectos industriales que se instalen en la región del Istmo de Tehuantepec, esto como parte del proyecto integral del Corredor Interoceánico. De acuerdo con cálculos oficiales, la demanda llegaría a los 11.3 millones de pies cúbicos diarios.
A diferencia de los combustibles líquidos, el gas natural no está contemplado en la política de “autosuficiencia energética” del gobierno federal, por lo que los proyectos de importación de este energético, principalmente de los Estados Unidos, se han reforzado.
El martes de esta semana, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la empresa ESENTIA Energy, antes FERMACA, firmaron una alianza estratégica para el desarrollo de más infraestructura para aumentar los puntos de entrega del gas proveniente del sistema conocido como Wahalajara, proyecto que involucrará una inversión por 300 millones de dólares.
En mayo pasado, la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), emitió el Acuerdo 18/2023, por el cual se considera como limpia la electricidad generada por los sistemas de cogeneración y ciclo combinado.
Esta semana, el mandatario federal justificó dicho cambio, argumentando que en otras partes del mundo se ha hecho lo mismo.
“Esto ya lo han hecho a nivel internacional porque una cosa es lo deseable y otra lo posible”, dijo López Obrador en su conferencia matutina del martes pasado.