Además de las pérdidas económicas por no aprovechar el gas natural en yacimientos asociados, Petróleos Mexicanos (Pemex) podría estar dañando los campos Quesqui e Ixachi tan solo por obtener de manera rápida una rentabilidad por el petróleo, además de causar un daño medioambiental.
“Desde mi óptica tiene una razón muy clara que es producir a como sea, producir cueste lo que cueste”, consideró Sergio Pimentel, socio de la Práctica de Energía en la firma de consultoría Agon.
Este miércoles, la agencia de noticias Reuters dio a conocer que, según documentos internos de la CNH, Pemex ha estado quemando de manera ilegal gas natural con un valor por los 342 millones de dólares durante los últimos tres años.
De ese monto corresponderían unos 275 millones de dólares a Ixachi y los 67 millones restantes a Quesqui.
Estas pérdidas están calculadas con base en los precios de los contratos no públicos para comercializar hidrocarburos, según citó tres documentos con fecha de agosto de 2022.
Pimentel, quien fuera también comisionado en la CNH, explicó a Energía a Debate que desde hace décadas Pemex ha privilegiado la extracción de petróleo crudo y condensados por sobre la de gas en campos asociados.
Recordó que el argumento de la petrolera estatal para no instalar infraestructura para el aprovechamiento del gas natural asociado es que su extracción no es rentable.
Sin embargo, el especialista también recordó que por ley tanto Pemex, como las empresas privadas operadoras en México deben aprovechar como mínimo 98 por ciento del gas en campos asociados.
Detalló que, acorde con los procedimientos establecidos por la CNH, se debe hacer un análisis de las dimensiones reales del yacimiento a través de un Programa de Evaluación.
“Cuando te brincas este análisis para llevar de inmediato el campo a producción, puedes dañar ese yacimiento”, advirtió el ex comisionado.
“Sí produces más temprano en la cadena de valor, pero puedes dañar el factor de recuperación en el largo plazo, que es una de las cosas que nuestra Ley de Hidrocarburos tutela”, agregó.
También dijo que Pemex y las demás empresas privadas deben hacer un Plan de Desarrollo que maximice el valor de los hidrocarburos en el tiempo.
Con respecto al medio ambiente, indicó que la Comisión debe coordinar acciones con la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) para investigar y, en su caso sancionar, a la empresa bajo el mando de Octavio Romero Oropeza.
“Se pueden y se deben coordinar el regulador de las actividades de exploración y producción que es la CNH y el regulador de las actividades que velan por el medio ambiente en México que es la ASEA”, afirmó.
Quesqui e Ixachi están considerados como campos prioritarios por la administración federal actual.
De acuerdo con cifras de la CNH, los 17 pozos productores que se encuentran actualmente en Quesqui alcanzaron una producción de 586.3 millones de pies cúbicos diarios (mmpcd) a noviembre de 2022, un volumen que ha ido incrementándose de los 296 mmpcd que registró en el mismo mes del año anterior.
Ixachi, por su parte, registró en sus 12 pozos productores una producción de 301.7 mmpcd al mismo mes, también con un incremento de los 241.2 mmpcd de noviembre de 2021.
En 2016, la CNH sancionó a Pemex por 2 millones 191 mil 200 pesos por incumplimiento de las metas de aprovechamiento de gas natural en el activo Ku-Maloob-Zaap, además de instruirle que debía realizar las acciones correspondientes en materia de infraestructura para este propósito.
El año pasado, asimismo, se reveló que la Comisión ahora bajo la presidencia de Agustín Díaz Lastra impondría a la petrolera del Estado otra multa por 40 millones de pesos por la excesiva quema de gas, conocida como “venteo”, precisamente en el campo Ixachi.
“Hay que ver si la CNH ya está llevando a cabo un Proceso Administrativo de Sanción (PAS) en donde le dan vista al regulado, el regulado tiene derecho a presentar pruebas, a exponer lo que a su derecho convenga, y la CNH en un procedimiento en forma de juicio, concluye con una resolución en la que impone una multa”, compartió Pimentel.