(Foto: Bob Perez, vicepresidente de Baker Hughes México y Latinoamérica)
La empresa Baker Hughes para México y Latinoamérica no tuvo conocimiento del contrato que celebró Keith Schilling con la señora Carolyn Adams para la renta de una casa de alto valor económico, ubicada en Houston, y en realidad no tenía por qué saberlo, explicó esta tarde Bob Perez, vicepresidente de Baker Hughes en México.
En conferencia de prensa convocada por el director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero Oropeza, el ejecutivo reveló los resultados de una auditoría que realizó el despacho de abogados R. McConnell Group a los contratos y correos electrónicos relacionados con el caso, entre otros, para determinar si existía alguna relación entre Schilling y Adams, esposa de José Ramón López Obrador, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador, o con la petrolera.
“No había nada que elevar bajo la política de Baker Hughes porque no había ninguna bandera roja”, dijo. “Tenemos más de 50 mil empleados y no es nuestra vocación ni nuestro derecho de investigar lo que hacen los empleados en su vida privada”, agregó.
Previamente, Pérez aseguró que una vez que comenzaron a salir los primeros reportes de prensa sobre este posible conflicto de interés, Baker Hughes empezó a hacer investigaciones internas tanto en México como en Estados Unidos.
Respecto a los hallazgos de la firma de abogados, especializada en investigación de ejecutivos y en cumplimiento de la ley, Perez afirmó que Schilling, quien de 2016 a diciembre de 2019 prestó sus servicios para la firma en Estados Unidos, Baker Hughes Company, no tenía contacto ni con la empresa en México ni con Pemex, por lo que no informó acerca de la renta del inmueble a la esposa del hijo del mandatario mexicano.
R. McConnell Group aseguró en un comunicado de prensa que para la investigación llevó a cabo entrevistas, realizó exámenes forenses y analizó archivos y correos electrónicos de la computadora de trabajo de Schilling, así como de la información que poseía la compañía de su puesto, responsabilidades y proyectos durante su estancia en ella.
Así, la firma de abogados encontró que Schilling no tuvo responsabilidad alguna ni estuvo involucrado en las actividades de Baker Hughes en México ni con Pemex.
Por su lado, Baker Hughes Company tampoco tuvo relación ni conocimiento de la operación de arrendamiento de su propiedad en Conroe, Houston, Texas.
También aclaró que Schilling arrendó la propiedad después de que fue transferido temporalmente a Canadá.
De acuerdo con el despacho, es común que los empleados que son asignados temporalmente a otra parte, den en arrendamiento su residencia principal, especialmente en Houston.
El despacho dijo no haber encontrado implicación o relación alguna con López Beltrán.
Aclaró que en julio de 2019, Adams tomó en arrendamiento la propiedad de Schilling, pero en ese momento no mencionó que la ocuparía también José Ramón López.
Confirmó que fueron agentes inmobiliarios, autorizados por el estado de Texas, quienes representaron tanto a Adams como a Schilling para la transacción.
Tampoco encontró algún comportamiento o conducta inapropiada por parte de Baker Hughes Company (EEUU) en relación con la operación de arrendamiento.
Por último, aseguró que Schilling realizó la operación de arrendamiento de manera independiente, sin la participación o conocimiento de Baker Hughes Company.