Pese a la ambiciosa agenda de transición energética del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, la Administración de Información de Energía (EIA, por sus siglas en inglés) del Departamento de Energía, adelantó que la demanda y producción del petróleo se revisó al alza para el resto de este año y en 2023.
La dependencia estadounidense estimó que la producción de petróleo aumentará a 11.92 millones de barriles diarios en 2022, cifra que crecerá un millón adicional en 2023, pues estima un promedio de 12.97 millones de barriles diarios para ese año.
La EIA aclaró que el incremento de la producción, que el año pasado se ubicó en 11.19 millones de barriles diarios, dependerá del comportamiento de la economía estadounidense.
Además, los datos de la agencia apuntan a que la extracción del hidrocarburo alcanzará en 2023 su punto más alto en la historia, después de que el récord anterior ocurrió en 2019, cuando extrajeron 12.29 millones de barriles diarios.
Demanda del mercado
La EIA añadió que el consumo de petróleo y otros combustibles también mantendrá su tendencia al alza entre 2022 y 2023.
El año pasado la demanda se ubicó en 19.78 millones de barriles diarios, mientras que para este año subirá a 20.53 millones de barriles y para 2023, la cifra se ubicará en 20.73 millones de barriles.
A diferencia de la producción, la demanda de petróleo y sus derivados en Estados Unidos se quedará cerca del máximo histórico, pero no lo alcanzará.
La base de datos de la EIA, que tiene registro desde 1973, señala que el año con mayor demanda en la historia fue 2005, cuando alcanzó 20.80 millones de barriles diarios.