México ocupó el lugar 34 de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) en el ranking de los precios de energéticos mas baratos, esto a pesar de los incrementos reportados en los últimos meses.
De acuerdo con datos del organismo internacional, el cual reúne a 38 países miembros, la inflación de energía en México fue de 8.3 por ciento a tasa anual al cierre de agosto, nivel que coloca al país como uno de los más baratos en precios energéticos a nivel mundial.
México supera a Israel que registró una inflación anual de 7.7 por ciento en los precios de energía, y a Hungría que obtuvo un nivel inflacionario de 4.3 por ciento.
En contraste, los países que reportaron una inflación más alta fueron: Turquía, Países Bajos y Estonia, mismos que obtuvieron un incremento de precios anual de 132.8 por ciento, 113.9 por ciento y 98.1 por ciento, respectivamente.
Por ejemplo, en el caso de los socios comerciales de México como Estados Unidos y Canadá, registraron una inflación de 23.8 y 19 por ciento, en cada caso.
En su medición para el índice de precios, la OCDE consideró elementos como los combustibles automotrices, las tarifas eléctricas y el gas residencial.
Cabe destacar que aunque los precios de los combustibles mermaron los bolsillos de los mexicanos y el gobierno se vio obligado a extender su estrategia de subsidios al Impuesto Especial Sobre Producción y Servicio (IEPS), en comparación mundial, los energéticos en México se mantuvieron hasta 3.6 veces por debajo del promedio de los países de la OCDE.
Según el Servicio de Administración Tributaria (SAT), el esquema de subsidios aplicados al IEPS le ha representado un costo al erario público de 307 mil millones de pesos.