Estados Unidos podría abandonar la Agencia Internacional de Energía (IEA, por sus siglas en inglés) o, en su caso, reformarla para que deje de promover las fuentes renovables, dijo este martes Chris Wright.
“Haremos una de las dos cosas: reformaremos la forma en que opera la IEA o nos retiraremos”, declaró el secretario de Energía norteamericano citado por Bloomberg.
Agregó que, en su parecer, es mejor reformar el organismo internacional.
En abril pasado, diversos funcionarios de la administración del presidente Donald Trump presionaron para que la agencia de investigación y análisis de energía considerada la más grande del mundo dejara de producir datos que, en opinión del mandatario estadounidense, favorecen las energías limpias por sobre los combustibles fósiles.
En línea con la política de Trump de dar mayor impulso al sector de los hidrocarburos de su país y reducir los apoyos fiscales y financieros al desarrollo de la energía “verde”, los representantes de su gobierno aplicaron presión para que la IEA cese su trabajo de promoción del cambio global hacia fuentes más limpias y las emisiones cero netas de carbono, según informaron agencias en su momento.
Cabe recordar que luego de tomar posesión como presidente de Estados Unidos, Trump firmó una orden ejecutiva que ponía un alto a los desarrollos de infraestructura para la generación eléctrica eólica en tierra y en mar. Su argumento fue que dicha energía sustentable era la más cara y que provocaba una caída de hasta 75 por ciento en el precio de las viviendas de los norteamericanos.
Financiamiento de EE.UU.
Una de las principales críticas de Wright es por los altos montos de financiamiento que la Agencia recibe por parte de Estados Unidos, en momentos en que la administración trumpista tiene compromisos con la industria del petróleo y gas.
En uno de sus últimos reportes, la IEA había pronosticado que la demanda mundial de petróleo crudo se estabilizaría esta década en la medida en que aumenten las flotas de vehículos eléctricos, además de otras medidas globales para reducir las emisiones y combatir el cambio climático.
“Eso es un disparate total”, expresó Wright en el marco de la Cumbre de Energía e Innovación de Pensilvania en la Universidad Carnegie Mellon de Pittsburgh, igualmente citado por Bloomberg.
Al respecto, el responsable de la política energética de EE.UU. añadió que ha sostenido reuniones con el secretario ejecutivo de la IEA, Fatih Birol para tratar el tema del cambio de rumbo del organismo.
La IEA, con sede en París, Francia, trabaja en colaboración con varios organismos multinacionales como la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, en inglés); la African Union; el Grupo de los Siete (G7); el Grupo de los 20 (G20); la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE); la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP); la Convención Marco sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas (UNFCCC); la Agencia Internacional de Energía Renovable (IRENA); la Plataforma BioFuture; el Programa Global de Electromovilidad (GEF), y el Regulatory Energy Transition Accelerator (RETA), entre otros.