La revisión de la metodología debe mejorar el nivel de confianza sobre la política en la materia.
Gerardo R. Bazán Navarrete, Gilberto Ortíz Muñíz y Jesús Cuevas Salgado
La aplicación de las nuevas tarifas eléctricas, elaboradas y aprobadas por la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para los sectores industrial, comercial y servicios, provocó inconformidades de parte de algunos gremios empresariales. Se realizaron conversaciones entre la CRE y los representantes empresariales para revisar la metodología de cálculo para las tarifas de los sectores inconformes.
Se trata de un cambio en un sistema de tarifas que históricamente tenía distorsiones. El nuevo esquema tarifario reconoce los costos para cada uno de los eslabones de la cadena en la industria eléctrica. La nueva metodología reduce de 30 a 12 las categorías tarifarias y desglosa los cargos derivados de la operación de los procesos o servicios de:
I. Transmisión;
II. Distribución;
III. La operación de los Suministradores de Servicios Básicos;
IV. La operación del Centro Nacional de Control de la Energía (CENACE), y V. Los Servicios Conexos no incluidos en el Mercado Eléctrico Mayorista.
La información disponible indica que entre las causas principales del incremento de tarifas se encuentran altos cargos por distribución y por capacidad. En todo caso, la CRE definió un período transitorio de 4 meses a fin de que los usuarios se familiaricen gradualmente con el nuevo esquema.
Tratando de analizar las bases metodológicas de las nuevas tarifas se encuentra que, de acuerdo con la CRE, un concepto fundamental es la recuperación de todos los costos eficientes de las empresas de CFE (generación, transmisión, distribución y suministro básico). En este sentido, la Ley de la Industria Eléctrica establece que la estimación de las tarifas debe partir del concepto de Ingreso Recuperable.
Entre los conceptos de costos eficientes e ingreso recuperable pueden existir diferencias de interpretación que producirán diferentes estimaciones tarifarias, pero el caso es que CRE tomó como base contable los estados financieros dictaminados de CFE correspondientes al año 2014. (1), (2), (3). Dicha información considera costos de:
- Operación, mantenimiento y administración (de la red de distribución).
- Comerciales (lectura, facturación y cobranza).
- Corporativos.
- Pasivos laborales.
- Depreciación.
- Aprovechamiento.
Pérdidas técnicas y no técnicas, entre otras.
La metodología toma en cuenta diversas variables como el número de usuarios por división de distribución y categoría tarifaria, el tipo de medición, la inflación y los riesgos por incobrabilidad, etc. En este sentido, la información en referencia adolece de factores exógenos, por ejemplo:
- Tradicionalmente los gastos de CFE en su conjunto no han gozado de fama de ser eficientes.
- El Aprovechamiento, cargo del orden del 9% anual que hacía la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sobre los activos de CFE, es un concepto que se eliminó y ahora se aplica el Impuesto sobre la Renta (ISR).
- El Gobierno Federal absorbió el 50% del pasivo laboral.
Así, los resultados de aplicar la nueva metodología con datos no recientes y con cierto grado de desconfianza, pueden producir una transición difícil entre las tarifas anteriores y las recientemente instrumentadas. Es el caso que las nuevas tarifas, elaboradas por la CRE, aplicadas a los sectores industrial y comercial, causaron inconformidades que se expresaron de la siguiente manera en algunos medios:
- El crecimiento y la competitividad de más de 5.5 millones de empresas de comercio, servicios y turismo podrían verse impactados si la Comisión Federal de Electricidad no cambia la fórmula con la que les cobra el suministro eléctrico.
- 97 mil micros y pequeñas unidades económicas resentirían el impacto en la segunda mitad del año, mientras que muchas medianas y pequeñas empresas ya recibieron consumos elevados de hasta 300 por ciento correspondientes a enero.
- Ésta fórmula aplicada por la CFE inhibe la competitividad de las empresas debido a que son cobros muy elevados para los empresarios, quienes están en la modalidad de consumo de alta y media tensión en el suministro de energía eléctrica.
La CRE aclara que no hay alza generalizada en las tarifas eléctricas y ha considerado las quejas como casos de excepción. Finalmente, se definió un período transitorio de cuatro meses, a fin de que los usuarios se familiaricen gradualmente con el nuevo esquema.
Tarifas residenciales
En cuanto a las nuevas tarifas residenciales, la primera característica es la aplicación del Artículo 139, párrafo Segundo de la Ley de la Industria Eléctrica que establece que el Ejecutivo Federal podrá determinar, mediante Acuerdo, un mecanismo de fijación de tarifas distinto al de las tarifas finales determinadas por la Comisión Reguladora de Energía, para determinados grupos de Usuarios del Suministro Básico.
Con esta resolución del Ejecutivo Federal, se mantiene la nomenclatura, la estructura tarifaria de consumo y el precio para los diferentes tramos de consumo. El cambio se encuentra en que ahora, los tramos de CONSUMO BÁSICO e INTERMEDIO se redujeron a la mitad, como se puede apreciar en el cuadro siguiente:
De esta manera, anteriormente, los consumos superiores a los 280 kWh se cotizaban al precio del excedente y, ahora es a partir de 140 kWh. Entonces para los consumidores habituales de hasta 140 no habrá cambio en su factura. Sin embargo, quienes consuman arriba de ese nivel su factura se verá incrementado sustancialmente.
Comentarios
A partir de los años 80 la mayoría de los países en el mundo han introducido reformas en el sector eléctrico considerando competencia, costos desagregados y una regulación efectiva, con diferentes resultados. Se han desarrollado una gran cantidad de análisis, algunas vigentes a pesar del tiempo transcurrido hasta la fecha (4), (5), (6). Integrar una escala de precios para lograr un balance entre eficiencia económica y la igualdad social es donde se han encontrado problemas como el que se está presentando en México.
Se presume que el resultado de las nuevas tarifas en México es:
- Obtener recursos para el erario, de acuerdo a filosofía de Empresas Productivas del Estado.
- Reducir subsidios a la energía eléctrica.
- Traspasar las ineficiencias de CFE, ahora Suministro Básico, a los contribuyentes.
Se entiende que la metodología distribuye las pérdidas técnicas y los usos ilícitos entre todos los consumidores (si bien socializar los usos ilícitos de la electricidad no resuelve el problema, al contrario las fomenta). Asimismo, ignora los altos márgenes de reserva acumulados por el sobredimensionamiento del crecimiento de la demanda del sector eléctrico. Queda la pregunta si también incluye las deudas por cobrar de los Municipios, Estados y otros consumidores.
Recomendaciones
- La revisión de la metodología es una oportunidad para mejorar el nivel de confianza sobre la política energética.
- Desarrollar metodologías orientadas a mejorar la eficiencia del sector eléctrico.
- Cambiar el modelo de recuperación de gastos a otro de costos eficientes.
- Desmotivar la proliferación de las pérdidas eléctricas y la instalación excesiva de capacidad en nuevas centrales, considerando que la demanda no ha crecido al ritmo esperado.
- Evaluar periódicamente los resultados de aplicar el esquema tarifario y hacerlos públicos.
REFERENCIAS
(1) Acuerdo por el que se autorizan las tarifas finales de energía eléctrica del suministro básico a usuarios domésticos. Acuerdo 123/2017 SHCP. Diario Oficial de la Federación. Noviembre de 2017.
(2) Metodología de cálculo y ajuste de tarifas de operación que aplicará la empresa productiva subsidiaria CFE Suministrador de Servicios Básicos. ANEXO A DEL A/058/2017. Comisión Reguladora de Energía.
(3) Metodología de cálculo y ajuste de las tarifas finales de suministro básico. ANEXO B DEL A/058/2017. Comisión Reguladora de Energía.
(4) Reforma del Mercado Energético. Enseñanzas aprendidas y próximos pasos con especial énfasis en los problemas de acceso a la energía de los países en desarrollo. Informe del Consejo Mundial de la Energía. Agosto 2004.
(5) Power Sector Reform in Latin America. Accomplishments, Failures and Challenges. Jaime Millán. Inter American Development Bank.
(6) Sharon Beder. La lucha por el control de la electricidad en el mundo. Fondo de Cultura Económica. 2005.* Gerardo Bazán es Premio Nacional de Química (gerardorbn@Yahoo.com). Gilberto Ortiz es miembro del Consejo Químico y del Comité de Energéticos de Canacintra (gortizyasoc@gmail.com). Jesús Cuevas es consultor independiente en temas de energía (jcuevasmx@hotmail.com).