La Comisión Reguladora de Energía (CRE) autorizó a Petróleos Mexicanos (Pemex) trasladar a los consumidores, los costos derivados de las pérdidas por robo de combustibles.
Durante su primera sesión ordinaria del año, los comisionados de la CRE aprobaron el proyecto en el que se autoriza a Pemex Logística el costo trasladable de las pérdidas no operativas, aplicable a los términos y condiciones para la prestación del servicio de transporte por ducto de petrolíferos, para el año 2023.
Mediante la resolución RES/064/2022, se acordó que los costos por pérdidas no operativas se trasladen a la tarifa que los permisionarios cobran a los usuarios de los ductos y éstos a su vez lo reflejan en los cobros al usuario.
El motivo es que el robo de combustible representa un costo adicional en la operación logística de la petrolera.
Si bien, los comisionados determinaron que los daños económicos que representen de la falta de combustible que no llegue desde el punto de inyección hasta el usuario final son responsabilidad del transportista (Pemex), la petrolera podrá solicitar que se le restituyan estos costos elevando la tarifa de sus servicios.
Entre enero y septiembre de 2022, Pemex perdió 14 mil 243 millones de pesos a consecuencia del robo de combustibles, una cantidad mayor a la de un año antes, cuando fue de 4 mil 801 millones de pesos, según datos de la petrolera.
Autorizan mayor generación de energía limpia en BCS
Durante la sesión, los miembros de la CRE aprobaron por unanimidad un incremento en el límite de capacidad de interconexión de centrales eléctricas, con capacidad instalada neta menor a 0.5 MW de generación distribuida, y generación limpia distribuida a la red general de distribución del sistema interconectado en Baja California Sur.
Previamente, el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) había informado que ya no podía interconectar más energías renovables en Baja California Sur hasta 2016-2027, debido a que la potencia disponible para instalar fuentes renovables en la entidad era de “cero” megawatts (MW).
Por otro lado, la CRE negó a Grupo Sanborns, empresa propiedad de Carlos Slim Helú, la modificación de cinco permisos de generación eléctrica.
El organismo rechazó con ello que esta compañía pueda cambiar las autorizaciones referentes al aprovechamiento de la energía eléctrica.