Energía A Debate

Las consecuencias económicas al debilitar el TMEC serían muy considerables para México y podrían recortar seriamente el potencial de crecimiento de los próximos lustros, advirtió este día el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).

Consideró que la posibilidad de aumentar los desencuentros comerciales con Estados Unidos y Canadá, en el marco del tratado conocido como TMEC, “genera una preocupación especial, ahora que han iniciado las consultas pedidas por nuestros socios comerciales, luego de diversas acciones del gobierno que contravienen lo acordado en el tratado”.

Aseguró que el entorno de negocios en el país ha seguido deteriorándose por la inquietud que generan “algunas” decisiones de política pública que, en lugar de favorecer la participación armoniosa de las fuerzas económicas del país, crean obstáculos, complicaciones e incertidumbre, añadió el IMEF en referencia a los cambios en la legislación en materia energética que ha impulsado la actual administración, esto sin mencionarlo.

En un comunicado, el organismo bajo la presidencia de Alejandro Hernández Bringas expuso un panorama de la situación económica y política actual nacional e internacional, así como el resultado de la Encuesta IMEF correspondiente a los meses de junio, julio y agosto de 2022.

“La confluencia de numerosos factores de gran impacto conforman un panorama económico difícil de entender y más aún de pronosticar”, inició el documento.

“La economía global, en lo general, y la de varios países de elevada influencia, en lo particular, enfrenta un entorno adverso en el que intereses geo políticos anacrónicos están minando la cooperación internacional, al tiempo que la inflación ha resurgido como la principal amenaza para el funcionamiento de la economía y los mercados financieros”, añadió.

Mencionó los esfuerzos tardíos de los bancos centrales por tomar medidas anti inflacionarias, el debilitamiento de la economía internacional y la contracción del Producto Interno Bruto (PIB) de varias naciones, entre ellas, Estados Unidos, por lo que se prevé que las políticas de los bancos continuarán endureciéndose.

También previó que la crisis energética en Europa, derivada del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, tendrá un efecto inflacionario que llevará a los bancos a dicho endurecimiento de la política monetaria.

“Al llegar el invierno sin el suministro de gas ruso a Europa, el alza de los precios de los combustibles provocaría un impacto inflacionario mayor, por lo que la política monetaria tendría que endurecerse mucho más allá de lo previsto, causando afectaciones de corto plazo sobre la actividad económica y abriendo la posibilidad para una recesión”, consideró el Instituto.

En cuanto a México, apuntó: “La economía luce básicamente estancada en los indicadores más recientes, al tiempo que la inflación ha alcanzado niveles no vistos en dos décadas, aun cuando Banco de México hace su trabajo al subir la tasa de interés de referencia con firmeza, luego de comenzar tarde al igual que otros bancos centrales”.

Un punto de preocupación para el clima de confianza es el reciente anuncio por parte del presidente de la República en el sentido de que la Guardia Nacional pasará a depender de la Secretaría de la Defensa Nacional.

“Decisiones como transferir el control administrativo de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, mediante un decreto que rebasa los cauces constitucionales establecidos, mina el Estado de derecho, piedra angular sobre la que descansa la sociedad, reduciendo la confianza y lastimando las perspectivas de crecimiento económico”, estimó.

En su mensaje, el IMEF señaló que es necesario insistir en que, a pesar de este panorama adverso, México tiene la oportunidad de generar una actividad económica más robusta para lograr el bienestar de la población, pero esto requiere ajustar la visión y la estrategia del país fortaleciendo la integración económica con sus principales socios comerciales.

Las perspectivas poco favorables

De acuerdo con la encuesta del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto, las perspectivas para México presentan un deterioro con algunos pequeños contrastes y siguen mostrando un panorama complicado y poco favorable.

Según la Encuesta, para 2022 el pronóstico de crecimiento del PIB se revisa ligeramente al alza, de 1.8 a 1.9 por ciento, lo que responde principalmente a mejores resultados de lo previsto en las cifras del PIB del segundo trimestre.

La inflación, por su parte, se revisa al alza, de 7.7 a 7.9 por ciento, como resultado de cifras superiores a lo esperado en los recientes meses.

Así, para 2023, el IMEF observa un panorama altamente incierto y complicado.

“Lo que en nuestra encuesta se muestra con un deterioro sensible en el pronóstico de crecimiento del PIB, de 1.8% a 1.4%. Cabe notar que tasas inferiores a 2% no alcanzan para atender adecuadamente las necesidades de nuestra población”, aclaró.

Respecto a la inflación anticipada para el próximo año, el Instituto calcula que aumenta de 4.5 a 4.7 por ciento, lo que a pesar de seguir marcando una reducción importante respecto al estimado de 2022 representa un resultado demasiado elevado comparado con la meta oficial de 3.0 por ciento.

Expectativas IMEF – 2022