Redacción / Energía a Debate
La agencia Moody’s redujo la tarde del jueves la calificación de la refinería de Deer Park de ‘Baa2’ a ‘Baa3’ y puso en revisión sus calificaciones a la baja.
Apenas un día después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunciara que el gobierno mexicano adquirirá la participación de interés de la empresa Shell en la refinería de Deer Park, la calificadora Moody’s consideró que esta adquisición provocará que la planta enfrentará un perfil crediticio más débil.
En una nota Moody’s explicó que la reducción en la calificación ‘senior’ de la refinería refleja la expectativa de la calificadora de que la recuperación total de las ganancias de la planta y su perfil de apalancamiento se extenderán más allá de 2021.
Al respecto, dijo esperar que Deer Park “administre proactivamente” sus requisitos de liquidez y refinanciamiento de 2021, incluido el refinanciamiento de una línea de crédito renovable a corto plazo de 130 millones de dólares con vencimiento a julio de este año, con los ingresos de los préstamos de los socios.
Sin embargo, Moody’s dejó entrever que en la revisión de sus calificaciones evaluará las enmiendas, “si las hubiera”, a los términos de compromiso con Shell, incluida la adquisición y venta de materias primas y productos de refinación por parte de Deer Park, mismas que actualmente se gestionan a través de Shell.
En ese sentido, detalló que el sitio de refinación de Deer Park está integrado y comparte la ubicación y algunos servicios con la planta química de Shell.
Así, añadió, la revisión también evaluará la nueva estructura de capital y las provisiones de liquidez luego del cierre de la venta, la política financiera bajo la propiedad total de Pemex y el apoyo esperado de Pemex y el gobierno de México.
El gobierno mexicano adquirió el 50.5% de la participación de Shell Oil Company, subsidiaria de Royal Dutch Shell PLC, en la planta Deer Park Refining Limited Partnership, de la cual el restante 49.5% está en posesión de Petróleos Mexicanos (Pemex) desde 1993.
El valor de la transacción es por 596 millones de dólares, más otros 980 millones de dólares en adeudos que cargaba la planta ubicada cerca de la ciudad de Houston, Texas.
La refinería tiene una capacidad de procesamiento de crudo de 340,000 barriles diarios promedio y ha mantenido una producción aproximada de 100,000 barriles de refinados.