(Enrique Alba Carcelén, CEO Iberdrola México. Foto: PwC)
Redacción / Energía a Debate
Las energías renovables ya son competitivas sin ningún tipo de subsidios, y cada vez lo van a ser más, además de que son la vía para lograr el objetivo de descarbonizar el planeta en 2050, afirmó Enrique Alba, Director General de Iberdrola México.
“Con opciones de almacenamiento, ya sea con baterías o en hidroeléctricas con rebombeo, las renovables incluso llegan a mercados con precio cero”, comentó durante su participación en el foro Siemens Energy Latin America Energy Week.
“Ya no hay prejuicios antiguos de que son tecnologías caras y poco rentables. Las grandes centrales eólicas, fotovoltaicas, incluso fotovoltaico marino, aportan precios competitivos, pero la generación distribuida también. La generación en sitio puede sustituir total o parcialmente la generación que viene de la red” tanto a nivel residencial como comercial, comentó.
Recordó que más del 80 por ciento del territorio mexicano, por su altitud y radiación, es apto para producir energía solar, y grandes regiones como Oaxaca y Tamaulipas, se prestan para la energía eólica. “La solar y la eólica se complementan para dar un sistema eléctrico más confiable”, dijo Enrique Alba.
Además, la mayoría de los países “van a pedir a sus socios comerciales que a nivel planeta podamos ser neutros en carbono”.
En ese contexto, el hidrógeno verde también se vuelve un negocio competitivo también para las industrias y en la movilidad, tanto en las ciudades como en carretera, y es una gran oportunidad para descarbonizar América Latina. “Esto va a llegar en pocos años, como ha sucedido con las renovables, y va a ser una realidad ambiental y económica para la región”.
Alba abogó porque las empresas tengan presente en sus estatutos un dividendo social, y no sólo el dividendo económico, como parte de su ética corporativa, comprometiéndose con la sociedad para dar empleo de calidad a nivel local, desarrollar profesionales, fortalecer cadenas de valor añadido, además de brindar bienestar a comunidades de bajos recursos.
Puso como ejemplo el que Iberdrola México lleva a cabo un proyecto para llevar la luz a 12 mil personas de una comunidad que no la tenía, lo cual brinda acceso a información y educación para las personas beneficiadas. “Quizás 12 mil parezca un número pequeño, pero si muchas compañías lo hiciesen, llegaríamos a cientos de miles de personas”.