La Iniciativa Climática de México (ICM) aplaude los nuevos compromisos anunciados por el gobierno de México, en donde se aumenta la ambición de su Contribución Determinada a nivel Nacional (NDC) de 22 a 35 por ciento en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero al 2030 con recursos propios.
Lo anterior se suma a una meta condicionada a mayor apoyo de la comunidad internacional de 36 a 40 por ciento, hecho que fue anunciado por el canciller, Marcelo Ebrard, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) realizada en Sharm El-Sheikh, Egipto.
En dicho Foro, México también anunció una meta a largo plazo, al comprometer emisiones netas cero en 2050.
Ante ello, la ICM se pronunció a favor de revisar y cambiar las políticas públicas necesarias para implementar la meta de 35 por ciento, y enfatizó la importancia de dar a conocer, de manera puntual y transparente, las acciones que el Gobierno de México emprenda para lograr su cumplimiento.
Además, la ICM subrayó que la transparencia en la comunicación de sus esfuerzos climáticos es fundamental para asegurar la trazabilidad de acciones y medidas viables y alcanzables con los recursos y las capacidades con las que el país ya cuenta.
Temas como electromovilidad y mayor penetración de energías renovables son estratégicos para concretar esas metas climáticas.
Piden avanzar en la implementación de acciones sustentables
El experto destaca que ICM realizó un análisis, elaborado por un equipo de especialistas, para proponer una NDC desde sociedad civil, que llega en un momento oportuno para que el gobierno mexicano tenga la posibilidad de utilizar la información como insumo de apoyo en el despliegue y la implementación de medidas encaminadas a cumplir con las nuevas metas.
En su documento “Contribución Determinada a nivel Nacional: Una propuesta desde la sociedad civil para aumentar la ambición a través de un enfoque de justicia climática”, la ICM propuso 88 medidas en los sectores de electricidad y eficiencia energética, transporte, petróleo y gas, agricultura, silvicultura y otros usos de suelo, residuos e industria.
“La finalidad de esta NDC desde la sociedad civil es contar con un insumo científico y técnico que garantice la implementación correcta y efectiva de acciones de descarbonización”, indicó.
Asímismo, consideró como desafío inmediato avanzar en la implementación adecuada de las acciones para acelerar la reducción de emisiones.
Recordó que dos de cada tres personas en México (el 68 por ciento) vive en condiciones de vulnerabilidad climática.
Por ello, consideró que es fundamental que las rutas de implementación, además de estar basadas en ciencia y respaldadas por robustos análisis técnicos, estén enmarcadas en las perspectivas de justicia climática y equidad de género.