Esta tarde se registró la explosión de un taller de conversión de Gas Natural Vehicular (GNV) en la colonia Mitras, ubicada en Monterrey, Nuevo León.
Según reportes de la televisión local de Monterrey, el incidente dejó tres lesionados, que sufrieron quemaduras por el flamazo.
El taller no contaba con ninguna certificación, una situación que se repite en distintos establecimientos que ofrecen la conversión de gasolina a GNV a precios extremadamente bajos, dijo una fuente con conocimiento del tema.
“Los talleres no cumplen con los requisitos mínimos de seguridad, no le dan garantía al cliente, no hay seguimientos ni revisiones, de los vehículos y se compran cilindros de mala calidad y kits de conversión que no tienen ningún seguimiento ni cumplen con las normas establecidas en el país”, añadió la fuente.
Aunque la explosión es un hecho aislado, distintos talleres de conversión a GNV han cerrado sus puertas en ciudades como Monterrey y Guadalajara, lo que ha dejado sin seguimiento a más de dos mil unidades que decidieron convertir sus vehículos para obtener un combustible más barato, con menos emisiones y con un rendimiento similar al de los combustibles tradicionales, como la gasolina y el diésel.
“Muchos de ellos han regresado al gas LP porque el ecosistema del GNV es muy complicado, no hay seguimientos, todo es difícil para los clientes”, añade la fuente.