Redacción / Energía a Debate
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la empresa canadiense TC Energy firmaron un Acuerdo de Entendimiento para destrabar los conflictos sociales que han impedido la terminación de la obra del gasoducto Tuxpan – Tula en algunas zonas del estado de Puebla.
“En aras de resolver las problemáticas heredadas por la administración anterior, que han costado cientos de millones de dólares al Estado mexicano y han provocado problemas a los pobladores indígenas de la sierra de Puebla, la CFE ha acordado con la empresa TC Energía tomar un papel más activo que permita resolver los conflictos sociales y culminar el gasoducto Tuxpan – Tula, fundamental para transportar gas natural desde el Golfo de México hasta el centro del país”, dijo la CFE este domingo en un comunicado de prensa.
El Acuerdo fue signado por Manuel Bartlett Díaz, director general de la CFE, y por Jennifer Pierce, presidenta de TC Energy.
A principios de julio pasado, la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier Carrillo, y la ministra de Promoción de las Exportaciones y Comercio Internacional de Canadá, Mary Ng, junto con el embajador de esa nación en México, Graeme C. Clark, realizaron una visita por las instalaciones de TC Energy en México.
En el recorrido, las funcionarias atestiguaron el trabajo conjunto de los empleados de CFE y TC Energy para destrabar el proyecto y garantizar el abasto del energético a diferentes zonas del país.
En este sentido, la CFE señaló que el Acuerdo de Entendimiento también está orientado a resolver el problema de abasto de gas natural al sureste del país y a la Península de Yucatán, que el gasoducto, proveniente del Sur de Texas y con conexión a Tuxpan, Veracruz, se interconectará a su vez con el ducto Mayakán, propiedad de Engie México y que corre por los estados de Tabasco y Campeche.
“La seguridad en el suministro de este gasoducto, dará confiabilidad al sistema eléctrico y será un motor de desarrollo para la península de Yucatán y el sureste de México”, asentó la empresa.
Ambas partes buscarán unificar todos los contratos de servicio de transporte en el centro del país en uno solo, lo cual implicará ahorros en los compromisos de pago de la CFE a la empresa canadiense, explicó.
De igual forma, agregó, la CFE obtendrá servicios adicionales en el nuevo sistema conjunto que ayudarán a continuar garantizando a los ciudadanos la seguridad y soberanía energética de México.
A principios de 2019, la empresa productiva del Estado comenzó una disputa con compañías transportistas de gas natural que operan en México, entre ellas TC Energy (antes TransCanada), argumentando que la CFE perdía millones de dólares por servicios no prestados por los privados, amparados en contratos que Bartlett Díaz calificó como “leoninos”.
Las cinco empresas no habían terminado siete proyectos de gasoductos principalmente por problemas de “fuerza mayor”, en particular, relacionado con conflictos sociales.
La CFE negoció individualmente los contratos con cada transportista, llegando a un acuerdo en que el pago por el servicio se extendería por diez años.
Sin embargo, como resultado de la revisión de la cuenta pública de ese año, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó que la renegociación de los siete contratos representaba a la larga un daño patrimonial contra la CFE por arriba de los 6,800 millones de dólares, según se reveló a principios de noviembre de 2020.
En su momento, la CFE negó el resultado del Auditor federal y afirmó que el Estado mexicano se había ahorrado unos 4,342 millones de dólares con la renegociación de los contratos.