La mejor forma de cumplir con los fines de la Expropiación de la Industria Petrolera es modernizar a Petróleos Mexicanos en los aspectos tecnológico y administrativo, con autonomía de gestión y con una visión a futuro que incluya nuevos combustibles más limpios, consideró el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.
“Yo creo que la mejor forma de cumplir con las finalidades de la Expropiación es modernizar a Pemex en todos los sentidos: tecnológicamente, en su administración, en darle autonomía de gestión, etcétera. Y con visión a futuro”, aseguró en entrevista exclusiva para Energía a Debate.
Abril Moreno, directora general de este medio, conversó con el hijo del General Lázaro Cárdenas del Río en ocasión del 85 Aniversario de la Expropiación de la Industria Petrolera a celebrarse este sábado 18 de marzo.
El presidente Andrés Manuel López Obrador convocó a una marcha y posteriormente a un acto cívico para conmemorar la nacionalización de la industria del petróleo ocurrida esa misma fecha pero de 1938.
Cárdenas Solórzano, ingeniero civil por la entonces Escuela de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México, durante décadas ha trabajado por mantener vigentes los ideales de su padre que lo motivaron a realizar la expropiación de esta industria en favor del pueblo de México.
Dijo no recordar mucho del momento histórico, puesto que apenas contaba con tres años de edad. Sin embargo, sí conserva en la memoria la conmoción que había en casa de la familia Cárdenas Solórzano y que sí percibía que se trataba de algo importante.
“Tengo la impresión de que fueron días [en los que] algo distinto sucedía. No sabía yo en ese momento qué, pero sí que eran días en que algo importante estaba sucediendo”, compartió con Moreno.
En opinión del Ing. Cárdenas, la industria petrolera ha sido fundamental para el desarrollo del país y su industrialización, aunque desde principios de los años ochenta del siglo pasado se perdió la finalidad de la expropiación, así como se dejó de lado la política de la integración de las cadenas productivas que se había venido consolidando durante las décadas anteriores.
“Antes de eso hubo un desarrollo importante de la industria petrolera. De ahí en adelante yo diría que se destinó más a la extracción de petróleo, se dejaron de atender otras ramas de la propia industria petrolera y se privilegió un extractivismo en muchos casos irracional”, agregó el Ing. Cárdenas, quien recibió a este medio en su casa.
Bajo un busto de su padre colocado cerca de una ventana, lamentó también que, desde la década de los años 1980, los recursos que ha generado Pemex se han destinado principalmente para gasto fiscal y en gran medida para gasto corriente.
“Ni siquiera para impulsar otros aspectos de desarrollo, [como] la educación o la salud, que son cuestiones de beneficio social, sino principalmente para cubrir gasto corriente”, comentó.
Durante la conversación, el Ing. Cárdenas también habló sobre la reforma energética que impulsó el ex presidente Enrique Peña Nieto, que convertiría a la petrolera en Empresa Productiva del Estado.
“Lo que pasa es que nunca se quedó bien definido qué era una Empresa Productiva del Estado, para empezar”, afirmó.
En este sentido se pronunció porque Pemex sea una entidad efectivamente productiva y efectivamente del Estado, pero que operara como cualquier otra empresa.
“Y también habría que modificarse, por lo tanto, el régimen fiscal de Pemex”, insistió.
Refinación y gas, dos temas complicados
Al platicar con Abril Moreno, el ingeniero Cárdenas expuso la necesidad de modernizar las seis plantas con las que cuenta actualmente el país y también reconoció que, en una visión a futuro, se debería comenzar a pensar en la conversión de las mismas hacia la producción de petroquímicos, toda vez que el país importa la mayor cantidad de estos insumos para cubrir su demanda.
Lo anterior, sin descuidar la producción de combustibles. “Hay que modernizar los procesos y modernizar las instalaciones. Si vamos a querer planchar en la casa con planchas de carbón, pues vamos a perder”, ejemplificó
Al tocar el tema de la adquisición y aprovechamiento de la refinería de Deer Park, en Houston, el entrevistado opinó que fue una buena inversión por parte del Estado mexicano, aun cuando aclaró que no estar seguro de que haya sido económicamente “lo más adecuado”.
“Entiendo que Shell también tenía interés en vender para bajar su calificación de que estaba contribuyendo o a la descarbinización”, manifestó.
Del mismo modo expresó sus dudas con respecto a la construcción de la refinería “Olmeca”, en el puerto de Dos Bocas, Tabasco.
“No sé si la inversión en Dos Bocas es la inversión más eficiente que pudo haber hecho el Estado mexicano”, afirmó, y recordó que el presupuesto inicial para la obra era de 8 mil millones de dólares, un monto que se ha incrementado al momento por arriba de los 18 mil millones.
Producción nacional antes que exportar e importar
Si bien el Ing. Cárdenas no niega el intercambio de energéticos, principalmente con Estados Unidos en las condiciones que convengan a México, sí es claro en que la autosuficiencia energética es importante, especialmente cuando hay eventualidades que ponen el riesgo el abasto interno de estos insumos.
Citó el caso de la tormenta invernal que se presentó a principios de 2021, cuando canceló las entregas de gas de Texas a México, lo que provocó cortes en el suministro eléctrico en varias partes del país.
Lo mismo con los combustibles, cuyas importaciones alcanzan entre 60 y 70 por ciento de la demanda interna.
Un punto donde fue enfático es que México debería poner el abasto de la demanda interna de petróleo crudo nacional en primer lugar antes de las exportaciones.
Visión a futuro
Si bien el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas sostiene que los principios de la Expropiación de la Industria Petrolera deben continuar vigentes y que Pemex debe seguir siendo una empresa del Estado, no cierra la posibilidad a mantener los esquemas de participación privada y mixta para el desarrollo de la industria en las áreas en las que convenga.
Asimismo, se expresó en favor del desarrollo de las energías renovables en el país, además de otras fuentes alternas y más recientes, como el hidrógeno.
“Se me hace muy grave que tengamos parques –no sé si son exactamente eólicos o solares– prácticamente construidos y que están parados”, comentó con un tono de indignación.
“Eso es simplemente una cuestión simplemente de una revisión de tarifas eléctricas y ponerse de acuerdo cuánto se tiene que pagar, quién entra primero, quién entra después a las redes”, agregó.