Estados Unidos hizo un llamado a Claudia Sheinbaum Pardo para que, en la reforma al Poder Judicial, se respeten las inversiones extranjeras y los acuerdos contenidos en el TMEC.
Brian Nichols, subsecretario de Estado para América Latina, dijo ante el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes que la transparencia judicial es vital para todos los inversionistas, sean nacionales o extranjeros, pero particularmente los estadounidenses y canadienses, por ser socios del tratado comercial entre las tres naciones.
En su visita a esa Cámara, Nichols reconoció que México es un país soberano y que puede cambiar su marco normativo cuando lo considere.
“Seguiremos insistiendo –sea cual fuere el futuro régimen legal de México– que todos los firmantes del TMEC respeten las disposiciones de protección de inversión extranjera contenidos en el Acuerdo”, enfatizó.
Respecto al nearshoring, Nichols confió en que la futura presidenta de México garantizará la relocalización de las empresas, dada su formación como científica.
“La presidenta Sheinbaum es una científica, ella trabajó para el Laboratorio (Nacional Lawrence Berkeley) del Departamento de Energía de Estados Unidos, así que creo que demostrarle con hechos la importancia de este tema será cómodo para ella”, consideró.
Sheinbaum Pardo heredará la continuación de las controversias promovidas por los gobiernos de Estados Unidos y de Canadá en el marco del tratado comercial de América del Norte, ante las constantes quejas de los inversionistas y empresarios de esas dos naciones que acusaron un trato discriminatorio por parte de la actual administración en México, principalmente en el rubro energético, a partir de las reformas al marco regulatorio.
Sheinbaum y su equipo han insistido en que necesitarán de las inversiones del sector privado para lograr las metas que se ha planteado en energía, principalmente la que tiene que ver con fuentes limpias, incluyendo la instalación de 80 gigawatts (GW) adicionales en su sexenio.
Para ello, la nueva mandataria deberá garantizar certidumbre jurídica para esas y otras inversiones que lleguen, considerando las relativas al nearshoring.
Pero, por el otro lado, Sheinbaum reiteró su intención de que continuará impulsando la reforma al Poder Judicial de México, un proyecto inconcluso del actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, que pretende que los jueces y magistrados sean electos por voto popular, un asunto que no ha sido bien recibido por inversionistas principalmente extranjeros.