La industria del gas licuado de petróleo (gas LP) refrenó su compromiso de garantizar el abasto del energético a la población y solicitó a las autoridades federales mantener un entorno de competencia y certeza jurídica y económica.
“Podremos garantizar el abasto de producto y la cobertura en todas las regiones del país, ofreciendo un servicio continuo, seguro y con precios competitivos”, manifestó Samuel Castro Ramírez, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas LP y empresas Conexas (AMEXGAS).
En su mensaje de inauguración del Congreso de Gas LP 2022, organizado por la Asociación, y ante la presencia de la secretaria de Energía, Rocío Nahle García, Castro Ramírez destacó las acciones por parte de la industria que representa, pero con la construcción de acuerdos con las autoridades para lograr ese objetivo, así como para combatir el robo y venta ilícita del hidrocarburo.
“Mediante la construcción de acuerdos, autoridades y distribuidores, podemos fortalecer la red de distribución, al mismo tiempo que combatimos el robo de gas LP y su venta ilegal”, afirmó.
A lo que agregó: “Este compromiso tan importante, traducido en acciones concretas de inversión, mantenimiento, capacitación y difusión, ejecutadas en un entorno de competencia, con certeza jurídica y económica, permitirán, con el apoyo y participación del Gobierno Federal, alcanzar el objetivo que nos planteamos”.
En su discurso, el líder de los gaseros del país refirió que actualmente la industria realiza más de 1 millón de servicios al día en todo el país, actividad en la que participan más de 200 mil colaboradores, atendiendo así a 80 por ciento de la población mexicana.
Afectaciones a la industria
Por su parte, Carlos Serrano, presidente ejecutivo de la Amexgas, aseguró que la afectación del robo de gas licuado de petróleo (gas LP) y su venta ilegal equivale a un promedio de 50 mil toneladas mensuales.
Explicó que este volumen representa entre 5 y 8 por ciento de las ventas totales de la industria en todo el país, que ascienden a las 650 mil toneladas.
“La industria tiene un promedio de venta mensual de 650 mil toneladas. Se estima que la afectación por el robo es de alrededor de 5 y 8 por ciento, eso equivale a una cantidad muy grande de producto”, expresó en una charla con reporteros al término del Congreso.
Ese 8 por ciento, detalló, equivale a unas 50 mil toneladas mensuales de gas al mes, una cifra que puede variar y que, según reconoció, en realidad nadie está midiendo.
Sin embargo, precisó que la mayor parte de esas 50 mil toneladas es extraída en la zona centro del país, por lo que es todavía más grave.
“Si eso se distribuyera proporcionalmente en todo el país, en las 32 entidades federativas, en las 220 regiones, pues la afectación sería del 5 al 7 por ciento, una afectación muy negativa pero mínima”, aseguró.
Sin embargo, añadió, el problemas se presenta más en los estados de Puebla, Estado de México, Ciudad de México, Veracruz y en algunas regiones del Bajío, Tlaxcala, Hidalgo y Querétaro.
En este sentido, recordó que la mayor parte de la extracción del producto se da en el ducto principal propiedad de Pemex que corre desde el Centro Procesador de Cactus, en Tabasco, hasta la ciudad de Guadalajara, Jalisco, atravesando los estados mencionados.
Por ello, consideró Serrano, a las personas que realizan esta actividad ilícita se les facilita logísticamente distribuirlo en estas zonas geográficas.
En consecuencia, también dijo, en esas zonas ya no es el 5 por ciento, sino un porcentaje mucho mayor que genera cadenas de distribución y que afectan fuertemente a la población y a la industria.
Respecto al cobro de piso que imponen bandas delincuenciales a las empresas distribuidoras de gas LP formalmente establecidas y que se ha denunciado de algunos meses a la fecha, el empresario dijo que se exige entre 500 y mil pesos semanales, dependiendo de la zona, principalmente por ruta de distribución.