El precio del West Texas Intermediate tuvo su peor caída diaria desde marzo, al contraerse 8.02 por ciento, y perder la barrera psicológica de los 100 dólares por barril, debido a los nuevos temores por una recesión global.
En la sesión de este martes, el referente estadounidense concluyó el día en 99.73 dólares por barril, un precio que no se veía desde abril, mientras que el Brent se redujo 9.21 por ciento, para acabar la sesión en 103.05 dólares por barril.
La analista líder de Banco Base, Gabriela Siller, dijo que las principales presiones a la baja fueron generadas por tres factores.
El primero de ellos, refiere, es un aumento en la percepción del riesgo por el temor a una recesión en Estados Unidos, a causa de las presiones inflacionarias, a lo que se suman los incrementos a la tasa de interés referencial de la Reserva Federal.
En segundo término, la ciudad de Shangái, en China, inició con nuevas rondas de pruebas masivas de coronavirus, lo que incrementa las preocupaciones de la implementación de más confinamientos, lo que afectaría la demanda global por el hidrocarburo.
En sentido contrario, la especialista advirtió que la preocupación por una oferta insuficiente se mantiene en la mente de los mercados, por lo que consideró que es poco probable que los precios se mantengan en los niveles actuales por mucho tiempo.