México tiene una gran oportunidad para mostrarle al mundo cómo se puede hacer una transición justa para la eliminación del carbón, pero la ha desperdiciado por un tema ideológico, dijo esta tarde Adrián Fernández Bremauntz, director ejecutivo de la Iniciativa Climática de México (ICM).
Lo anterior, en referencia a que el país sigue apostando por este mineral para la generación de energía eléctrica, cuando podría recibir incluso financiamiento externo y desarrollar programas sociales que resuelvan la situación de las seis mil familias que dependen de la extracción del carbón para alimentar a las centrales carboeléctricas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) del estado de Coahuila.
“México tiene una gran oportunidad para mostrarle al mundo cómo se puede hacer una transición justa para la eliminación del carbón”, dijo aseguró durante un foro virtual organizado por el Clúster Metropolitano de Energía.
“Justa, porque significa entre otras cosas que nadie se queda sin empleo”, explicó. Todo lo contrario, abundó, se debe hacer una reconversión productiva y laboral para que todas las familias que dependen de la extracción del mineral puedan acceder a un mejor empleo.
En este sentido, durante su ponencia “La Cumbre Climática de Glasgow, entre críticas, promesas y compromisos”, el directivo de ICM cuestionó que México, con todas sus capacidades en recursos y con los programas sociales que está implementando la actual administración federal, no sea capaz de resolver la vida “para bien” de esos seis mil trabajadores del carbón.
“Estas cosas no son ideológicas. Hay que escuchar, hay que entender, tenemos que estudiar y repasar”.
Adrián Fernández, ICM.
Y criticó de la misma forma la falta de entendimiento del asunto. “Estas cosas no son ideológicas. Hay que escuchar, hay que entender, tenemos que estudiar y repasar”, subrayó.
En el foro, moderado por Jorge Young, presidente del Clúster Metropolitano de Energía, Fernández Bremauntz refirió el caso de Sudáfrica, contrario al de México.
“Sudáfrica firmó el primer gran acuerdo con la Unión Europea y con Estados Unidos para recibir cerca de 9 mil millones de dólares para iniciar una transición acelerada a quitar las plantas de carbón, pero justamente con ese énfasis de lo social y de los económico”, expuso.
“Las personas en el centro, las personas primero, sí es posible. Hay que tener un mínimo de entendimiento”, insistió.
Previamente, Jorge Young resaltó que México actualmente es un país de altas desigualdades sociales y económicas que, entre otras cosas, necesita de la justicia climática y que se le dé a la misma la importancia que tiene.
“La falta de apoyo para el desarrollo de electricidad con energías renovables y limpias, y la falta de estímulos para el desarrollo de la electromovilidad, son un hecho, a diferencia de lo que sucede en otros países algunos de ellos de nuestra América Latina”, añadió.