(Israel Hurtado, Abril Moreno, Santiago Barcón, Diana Pineda y Javier Mundo)
Algo positivo de la política energética de la nueva administración es que no quedará cerrado el mercado eléctrico completamente, aunque sí bajo un esquema “extraño” que deberá definirse en leyes secundarias, consideró Abril Moreno, directora general de Energía a Debate.
“No sabemos bien cómo va a funcionar el mercado, cómo va a funcionar la participación de las asociaciones entre la CFE y el sector privado; cómo le van a contabilizar a uno, cómo le van a contabilizar al otro; cómo va estar el despacho eléctrico. Hay muchas dudas”, expuso.
En su participación en el Encuentro Internacional de Energía México (EIEM) 2024, la directiva calificó como positivas las figuras de participación privadas que se plantearon en la Estrategia Nacional del Sector Eléctrico 2024-2030 dada a conocer por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo la semana pasada.
“En la parte eléctrica considero que hay buenas noticias con las figuras básicas que son generación distribuida, generación exenta, el abasto aislado interconectado y el almacenamiento”, refirió.
Durante el panel “El futuro de las energías renovables en México bajo el nuevo gobierno”, moderado por Santiago Barcón, Abril Moreno explicó que tan solo la generación distribuida experimentó en los último años un crecimiento promedio de 1.5 gigawatts (GW) anuales.
“Si siguiéramos esta tendencia, entre la exenta y la distribuida podríamos tener aproximadamente 9 GW de energía exenta y de generación distribuida. Eso sería bueno para la matriz eléctrica”, concluyó.
Por su parte, Diana Pineda, socia en Sainz, coincidió con Moreno en cuanto a que por ahora México tiene un rezago regulatorio que provoca incertidumbre para las inversiones, por lo que urgió en que salgan las leyes secundarias establecidas en la reforma energética recientemente aprobada y que marca un plazo máximo de 180 días naturales.
“Necesitamos que se acaben de trasladar a leyes secundarias, reglamentos, regulación, todos estos cambios estructurales que se están haciendo a nivel macro, que permita a los inversionistas saber cuál es el mapa que deben de seguir para desarrollar proyectos en energías renovables en México y más porque estamos tratando de anticipar nuevas inversiones”, apuntó.
Respecto al destino de los órganos reguladores del sector, dijo que se anticipa que mantendrán su autonomía técnica, algo que caerá muy bien en el ánimo de inversión, según su opinión.
Sin embargo, aclaró que lo anterior deja abiertas muchas interrogantes de si van a ser órganos desconcentrados o van a estar totalmente absorbidos por la Secretaría de Energía (Sener).
“¿Realmente un desconcentrado tiene autonomía técnica o más bien tiene que estar sujeto a los movimientos políticos como tradicionalmente venía pasando con la organización administrativa de hace ya algunas décadas? ¿Cuál va a ser el rol de la CNH, sino también del CENACE mismo?”, cuestionó.
Al respecto, Israel Hurtado, presidente de la Asociación Mexicana de Hidrógeno y Movilidad Sustentable, afirmó que los cambios frecuentes y radicales en las políticas públicas en materia energética no generan certidumbre a las inversiones ni a los proyectos.
“No podemos tener una política pública de largo plazo con tantos cambios, tantos cambios muy radicales. Eso no trae certidumbre, certeza. A mi juicio, no es bueno para el sector”, expresó.
Sobre lo mismo, manifestó su confianza en que en el Plan Nacional de Desarrollo correspondiente a la actual administración se podrá poner más planeación al sector.
En su oportunidad, Javier Mundo, socio líder de Energía y Recursos Naturales de KPMG México, subrayó la urgencia de sumar a las inversiones privadas para poder alcanzar las metas de generación limpia que se ha planteado el gobierno de Sheinbaum Pardo para 2030.
Primeramente dijo que México no va a lograr este año cumplir la meta de 35 por ciento de su generación eléctrica total a partir de fuentes renovables. Aun con ello, recordó que la presidenta de la República aumentó la meta a 45 por ciento para 2030.
“Esto implica grandes inversiones. Con datos de la AMDEE [Asociación Mexicana de Energía Eólica], se hablaba que para alcanzar ese 45 por ciento de energía renovable, se requieren entre 35 y 40 GW de capacidad en los próximos 6 años. Eso implica inversiones de 50-60 mil millones de dólares”, citó.
Igualmente, recordó que actualmente en México se encuentran instalados 7.6 GW de energía eólica en 15 estados del país. Y solamente de energía solar, hay una capacidad que está hoy día esperando que se le otorguen los permisos por otros 15 GW.