Cuatro reactores nucleares afectados por corrosión en Francia quedarán fuera de operación por varias semanas, lo que tensa aún más el suministro de energía en el país e incrementaría los precios que, de por sí, ya están en niveles inéditos.
El diario francés Le Monde informó que el día de ayer, la empresa estatal Électricité de France (EDF) publicó el nuevo calendario de producción de energía nuclear para lo que resta de 2022, estimada entre 280 y 300 terawatts por hora (TWh).
Sin embargo, un portavoz de la empresa reconoció este jueves que la producción “probablemente” se encuentre en el nivel más bajo de ese rango, mientras se hacen las investigaciones y los trabajos de reparación.
Le Monde reportó que el precio de la electricidad en Francia lleva varios meses subiendo, batiendo récords históricos. Alcanzó los 900 euros el megawatt-hora (MW) el jueves, para entrega el próximo año, frente a menos de 100 euros hace un año, y menos de los 50 euros “ordinariamente” en años pasados.
Entre las operaciones de mantenimiento programadas y las paradas relacionadas con la corrosión, el jueves se pararon 32 reactores nucleares, de un total de 56, incluyendo los cuatro reactores de hoy.
El descubrimiento, en los últimos meses, de problemas de corrosión bajo tensión ha llevado a la paralización de 12 reactores, los demás cerrados por mantenimiento planificado, dijo el diario.
Detalló que estos problemas de corrosión se detectaron o sospecharon en las soldaduras de los codos de los tubos de inyección de seguridad (RIS) –que permiten refrigerar el reactor en caso de accidente– conectados al circuito primario.
Esta llamada corrosión por “esfuerzo” da como resultado pequeñas grietas. EDF propuso un método para comprobar y solucionar estos problemas, validado a finales de julio por la Autoridad de Seguridad Nuclear, que dio su visto bueno para que el grupo controle todos sus reactores hasta 2025, por ultrasonidos.
Los cuatro reactores afectados por la extensión de la interrupción son: Cattenom 1 (regreso a la red ahora programado para el 1 de noviembre), Cattenom 3 (11 de diciembre), Cattenom 4 (14 de noviembre) y Penly 1 (23 de enero de 2023).
Le Monde también aseguró que la producción nuclear de EDF ya se encuentra en un nivel históricamente bajo, lo que ha contribuido a un aumento sin precedentes en los precios mayoristas de la electricidad.
Muchos otros reactores están en mantenimiento para compensar los retrasos impuestos por el período de confinamiento relacionado con el Covid-19. A mediados de mayo, la empresa ya había tenido que revisar su estimación de producción nuclear anual.
A pesar de ello, a mediados de julio, ante el Senado, un alto funcionario de EDF quiso parecer tranquilizador. “No ha habido un apagón en Francia desde 1978 y, aunque estamos en una situación muy difícil, todavía hay muchas posibilidades de que pasemos el invierno sin cortes de carga”, declaró Marc Benayoun, director ejecutivo de EDF a cargo de clientes, servicios y territorios. Más aún “si las existencias de gas están normalmente llenas”, agregó.
A este respecto, el diario dijo que Francia había llenado al 90 por ciento para este jueves sus reservas de gas para el invierno según la plataforma European Aggregated Gas Storage Inventory (AGSI), y que iba por buen camino para cumplir con sus objetivos al 100 por ciento de cara a afrontar la escasez relacionada con la guerra en Ucrania.