En México urge establecer buenas políticas públicas para acelerar la descarbonización de la economía, aseguró Adrián Fernández, CEO de Iniciativa Climática de México (ICM).
“Con buenas políticas públicas en materia de energía podemos avanzar a descarbonizar ese sector, podemos avanzar a garantizar a la gran industria de México que tiene acceso a energía limpia y barata para poder hacer planes de largo plazo y que no les cambien la jugada”, dijo Fernández durante la conmemoración de los 30 años de Geocycle, una empresa de Holcim, especializada en economía circular.
Desafortunadamente, añadió, por el momento el gobierno federal no cuenta con esas políticas, pero es necesario que el sector privado siga avanzando en sus políticas de descarbonización para mantener la competitividad a nivel internacional.
Añadió que a nivel mundial, zonas como Europa y Estados Unidos están empezando a implementar impuestos al carbono a los países que produzcan con altas emisiones de carbono.
“Europa ya tiene un capítulo donde va a establecer impuestos o tarifas fronterizas para aplicarse a países que quieran seguir exportando cemento, acero, aluminio y otros productos, por ejemplo, de India hacia Europa. Esto es un hecho, porque Europa exigirá comprobar la evolución de la matriz energética a cada país para establecer una relación entre las emisiones y las unidades de producción”, mencionó.
El especialista dijo que si bien el país aumentó la meta de reducción de emisiones de CO2 de 22 a 35 por ciento, no le ha dicho al mundo cómo alcanzará el objetivo.
“Hoy se sabe en tiempo real, qué hace cada uno de los países en materia de descarbonización. Si México sigue insistiendo con el combustóleo y el carbón, bloqueando las renovables y otras cosas más, el mundo lo sabe”, advirtió.
Además, habrá cada vez más mecanismos para hacer un seguimiento del desempeño real de los países y las empresas.
Justicia en la transición
El especialista de ICM añadió que el organismo participa en la elaboración de las Asociaciones para la Transición Energética Justa (JETP, por sus siglas en inglés).
Como ejemplo, Adrián Fernández destacó el caso de la transición energética propuesta por Sudáfrica, basada en buenas políticas públicas, así como una fuerte reducción del uso del carbón en la matriz energética, y que será sustituida por fuentes renovables.
Aseguró que en Sudáfrica la matriz energética depende en 80 por ciento del carbón, mientras que en México apenas representa ocho por ciento, al tiempo que en la economía africana planean cerrar minas de carbón, una industria de la que dependen alrededor de 80 mil familias, mientras que en el país, apenas seis mil familias dependen de esta industria en Coahuila.
Para ello, detalló que se dará un primer apoyo pequeño de ocho mil 500 millones de dólares para financiar la transición energética justa en Sudáfrica.
“Hay que utilizar la indispensable transición energética como palanca para mejorar el bienestar de la mayoría que dejamos atrás por décadas”, aseguró.