El mercado de los autos eléctricos en México va avanzando, pero todavía existen algunos factores que hay que encarar, como el fomento de una cultura hacia la electromovilidad y una comunicación más efectiva, además del desarrollo de infraestructura adecuada con participación pública y privada.
Con ello, la marca automotriz italiana Maserati considera que con estos y otros factores el mercado mexicano podrá avanzar hacia la transición energética, misma que ya es un hecho y es hacia donde la industria se dirige, asegura.
“Creo que al final vamos hacia allá. La transición ya inició y las grandes marcas estamos sumados a la parte eléctrica hacia al 2030”, dijo Guillermo Ordóñez, director de Marketing de Maserati México y Rolls Royce México.
En su visión, en el país todavía faltan varios factores en los que es necesario trabajar, desde la cultura de cómo utilizar racionalmente el automóvil y de la mejor manera, y una mejor comprensión de las vías carreteras para poder optimizar las tecnologías de la electromovilidad, hasta los incentivos gubernamentales con participación de la iniciativa privada para el desarrollo de un ecosistema eléctrico, explicó para Energía a Debate.
Adelantó que la firma italiana tiene pensada la introducción en México de vehículos eléctricos enchufables para 2024, por lo que consideró que es importante trabajar en esos temas.
A nivel global, Maserati ya ha programado para 2030 que toda su gama de producción será eléctrica.
Actualmente, en nuestro país 3 de cada 5 unidades que se venden bajo esta firma son autos híbridos (que alternan con gasolina y baterías eléctricas), cuando hace apenas dos años todos tenían tecnología de combustión interna, refirió Ordóñez.
De acuerdo con cifras de la industria, en México se vendieron alrededor de 5 mil 600 unidades en 2022, considerando eléctricas, eléctricas enchufables e híbridas.
La planta productiva, sin embargo, sacó un volumen cercano a las 80 mil unidades en el mismo año, la gran mayoría para exportación.
El parque eléctrico, sin embargo, apenas llega a los 43 mil vehículos.
Entre los retos de la industria se encuentra la instalación de puntos de recarga en el país.
Según datos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), hoy día están instaladas poco más de 2 mil estaciones de carga en todo el país.
Varias armadoras y comercializadoras automotrices, así como compañías energéticas propietarias de estaciones de servicio para venta al público de gasolinas y diesel, están formando alianzas con empresas eléctricas para, en el mediano plazo, instalar puntos de recarga.
En este sentido, Maserati –una marca en alianza con otras armadoras europeas que forman el Grupo Stellantis– no descarta hacer lo mismo para el mercado mexicano, confirmó Guillermo Ordóñez.
“Habría que ver qué tipo de conector vamos a ofrecer al mercado. En la medida que tengamos las características adecuadas, buscaremos la manera en la que, por contribución social, responsable y también por experiencia al cliente, hagamos estas alianzas”, aseguró.
Por último, el directivo destacó los beneficios ambientales de la electromovilidad, pero también hizo hincapié en toma consciencia sobre los cambios que requiere la adopción de las nuevas tecnologías para la movilidad.