Cancelación adelantada de autoabastos incrementa innecesariamente costos de producción de empresas: IMCO

La cancelación anticipada de los permisos de autoabasto de electricidad incrementaría de forma innecesaria los costos de producción de las empresas que consumen energía bajo ese esquema, advirtió el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).

Por ello, el organismo recomendó incentivar la migración de los permisos en esta modalidad a permisos de generación eléctrica al amparo de la Ley de la Industria Eléctrica (LIE).

En su más reciente estudio “El Autoabasto eléctrico en datos”, dado a conocer este jueves, el organismo bajo la dirección de Valeria Moy refirió que desde 1994, año en que se creó la figura, se han otorgado un total de 468 permisos de autoabastecimiento, de los cuales 347 aún siguen vigentes. En total, la inversión conjunta ha sido de 26.8 mil millones de dólares para la construcción de centrales eléctricas bajo esta modalidad.

El IMCO aclaró que la mayoría de ellos han sido otorgados a privados, pero también hay permisionarios del sector público. Del total de permisos autorizados entre 1994 y 2019, 430 han sido para particulares y los 38 restantes para dependencias y entidades de la Administración Pública Federal y gobiernos locales.

“La figura del autoabasto se creó en un contexto en el que el Estado mexicano no tenía la capacidad financiera ni operativa para proveer energía competitiva para ser atractivo a la inversión en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)”, recordó el organismo.

También comentó que esa figura estaba prevista en la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, pero fue eliminada de la legislación con la abrogación de esta normativa, con la entrada en vigor de la Ley de la Industria Eléctrica y con la creación del Mercado Eléctrico Mayorista  entre diciembre de 2013 y agosto de 2014, que busca inyectar competencia en la generación eléctrica.

No obstante, los permisos se respetaron por un periodo de transición dado el principio de no aplicación retroactiva de la ley, igualmente recordó el Instituto.

De acuerdo con la Ley de 2014, la figura del autoabasto desaparecerá de forma gradual a lo largo de los siguientes años, conforme sus Contratos de Interconexión Legados caduquen. Según estipula la legislación vigente, la fecha estimada del fin de este esquema será mayo de 2039; esto es, 20 años después de la emisión de los últimos seis permisos de autoabasto autorizados por la Comisión Reguladora de Energía (CRE). 

El IMCO apuntó que los autoabastos han sido objeto de discusión en años recientes ante diversos cambios regulatorios y legales orientados a limitar sus alcances, e incluso revocar de forma anticipada los permisos emitidos. “De ello dan cuenta distintas resoluciones de la CRE emitidas en mayo y octubre de 2020, la reforma a la LIE aprobada en marzo de 2021, así como la recién desechada iniciativa constitucional de Reforma Energética”, indicó.

Por ello, el Instituto advirtió de las consecuencias de terminar anticipadamente esta figura:

• Atentaría contra el estado de Derecho y la certidumbre jurídica al vulnerar las condiciones bajo las cuales las empresas y entidades públicas invirtieron en la construcción de centrales de generación e infraestructura de transmisión.
• Inhibiría la capacidad del país para atraer inversión nacional y extranjera en el sector eléctrico y en otros sectores económicos.
• Incrementaría de forma innecesaria los costos de producción de las empresas que consumen electricidad bajo este esquema.
• Obstaculizaría el cumplimiento de los compromisos adquiridos por México en el Acuerdo de París al reducir la participación de energías renovables en la matriz de generación eléctrica del país.

En esas circunstancias, el IMCO se pronunció por fomentar un mercado eléctrico competido, que se caracterice por una menor huella de carbono y en menores tarifas para los usuarios finales de energía.

Para lograrlo –añadió–, se requiere facilitar el tránsito de los autoabastos al mercado de acuerdo con la legislación vigente y no acabar con ellos de forma anticipada. En este sentido, propone:

• Garantizar la certidumbre jurídica en el sector eléctrico. La desaparición a los autoabastos debería darse de forma gradual de acuerdo con las fechas establecidas en la legislación, es decir, en el momento en el que expiren sus Contratos de Interconexión Legados.
• Incentivar la migración de permisos de autoabastecimiento a permisos de generación al amparo de la LIE. La CRE debe permitir una adecuada migración de los permisos de autoabastecimiento hacia permisos de generación previstos en la ley vigente.