Países Bajos y Dinamarca se han sumado a la lista de naciones que se han quedado sin el suministro de gas ruso, debido a que se negaron a pagar por el combustible en rublos.
A finales de marzo, el presidente ruso, Vladimir Putin, emitió un decreto en el que obligaba a todos los países “hostiles” a abrir una cuenta en rublos para pagar por el gas de Rusia que se reparte a Europa.
Sin embargo, Ørsted, la mayor multinacional danesa de energía, y la energética estatal neerlandesa Gasterra, aseguraron que no aceptarán las condiciones del Kremlin, pues las consideran ilegales.
Gazprom cortará el flujo de gas después de que concluyan los contratos vigentes, es decir mañana 31 de mayo, aunque las empresas de los países europeos aseguran que tomaron las precauciones necesarias para protegerte ante los eventuales cortes de gas.
“En Ørsted, nos hemos estado preparando para este escenario a fin de minimizar el riesgo de que nuestros clientes, que son principalmente empresas importantes en Dinamarca y Suecia, experimenten cortes en el suministro de gas. Tenemos capacidad de almacenamiento en Dinamarca y Alemania, y actualmente estamos llenando estas instalaciones de almacenamiento para asegurar el suministro de gas a nuestros clientes y contribuir a la seguridad de suministro del mercado”, indicó la empresa en un comunicado.
Además, Ørsted reiteró que apoyan “plenamente” la ambición del gobierno danés y la Unión Europea (UE) quienes buscan eliminar la dependencia del gas ruso y acelerar la transición energética en el viejo continente.
La compañía neerlandesa, Gasterra, que cuenta con participación del gobierno y la empresa Shell, indicó que Gazprom ya confirmó que los envíos se detendrán.
“Gasterra no aceptará las demandas de pago de Gazprom. Esto se debe a que hacerlo correría el riesgo de infringir las sanciones impuestas por la UE y también porque existen demasiados riesgos financieros y operativos asociados con la ruta de pago requerida. En particular, la apertura de cuentas en Moscú bajo la ley rusa y su control por parte del régimen ruso representan un riesgo demasiado grande para la empresa”, detalló Gasterra en un comunicado.
Ante la negativa de las compañías europeas, Gazprom dejará de entregar dos mil millones de metros cúbicos de gas, aunque señalan que ya cuentan con nuevos proveedores.
Países Bajos cuenta con sus propias reservas de gas natural y además importa gas desde Noruega, por lo que su dependencia de Moscú no es tan grande.
Así, Países Bajos y Dinamarca se convierten en el cuarto y quinto país, respectivamente, en dejar de recibir el insumo de Rusia, después de Polonia, Bulgaria y Finlandia, quienes decidieron no abrir cuentas en rublos y buscar proveedores alternativos del combustible.
En contraste, empresas como la alemana Uniper y Eni de Italia abrieron cuentas en rublos para garantizar los flujos de gas hacia sus territorios.