La deuda total de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que incluye los pasivos a corto y a largo plazo, tuvo un incremento de 14.4 por ciento, o 56 mil 600 millones de pesos, entre 2021 y 2022.
De acuerdo con el estudio CFE en la mira: Análisis de resultados al cuarto trimestre de 2022, elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), al cierre del año pasado la deuda total de la empresa que dirige Manuel Bartlett Díaz se ubicó en 450.5 mil millones de pesos.
El incremento en el saldo se debe principalmente a un alza en la deuda de corto plazo. Los datos recopilados por el Imco señalan que entre el cierre de 2021 y el 31 de diciembre del año pasado, la deuda de corto plazo pasó de 37.3 mil millones de pesos a 95.1 mil millones, lo que representa un incremento de 155.1 por ciento.
El resultado de la deuda total fue parcialmente compensado por una disminución de 0.4 por ciento en la deuda de largo plazo, que al cierre del año pasado se ubicó en 356 mil 600 millones de pesos.
Del saldo total de la deuda de la CFE al cierre de 2022, 59.7 por ciento corresponde a deuda documentada, 26.1 por ciento a deuda Pidiregas y 14.2 por ciento a inversiones fiduciarias, detalla el documento.
Tres pérdidas consecutivas
Al cierre del año anterior, la CFE perdió 39.8 mil millones de pesos, lo que representó su tercer año consecutivo con pérdidas. En el acumulado 2020-2022, la empresa productiva del Estado perdió 231 mil 959 millones de pesos, de acuerdo con los datos de los reportes financieros correspondientes a cada año.
La pérdida de 2022 ocurrió a pesar de que el subsidio que le otorgó el gobierno federal para compensar las pérdidas por las tarifas domésticas alcanzó 82 mil 200 millones de pesos, lo que representó su cifra más alta en todo el sexenio.