El escenario para México en caso de perder en las mesas de consulta solicitadas por Estados Unidos es bastante sombrío, y Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base planteó distintos escenarios en los que podría caer el país, si el resultado del mecanismo del T-MEC es negativo para México.
Según los cálculos de la analista, el impacto podría ir de una ligera alza en el tipo de cambio, hasta un retroceso económico de 30 años para la economía nacional.
El 20 de julio, el gobierno de Estados Unidos solicitó consultas de resolución de disputas con México bajo el Acuerdo Comercial Estados Unidos-México-Canadá (T-MEC), que se relacionan con ciertas medidas de México que socavan a las empresas estadounidenses y la energía producida en los EEUU a favor de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
Este mecanismo implica la resolución de controversias entre naciones, mismas que pueden derivar en la imposición de aranceles en distintos sectores en caso de que se detecten afectaciones relativas a los acuerdos establecidos en el T-MEC.
Ese mismo día, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que “no va a pasar nada”, y hasta presentó durante su conferencia de prensa matutina la canción La crisis, de Chico Ché, que entre otras cosas dice “uy qué miedo, mira como estoy temblando”, en referencia al conflicto con Estados Unidos.
Gabriela Siller mencionó que la resolución del conflicto podría tardar entre seis meses y un año, aunque no existe un tiempo definido para alcanzar una solución.
Escenarios
En primera instancia, la especialista de Banco Base plantea un caso hipotético en el que Estados Unidos gane el panel e imponga aranceles de cinco a 10 por ciento a México. En este caso, calcula la analista, el tipo de cambio se depreciaría a un rango de 21.80 a 22 pesos por dólar, lo que compensaría parte del alza en precio por el arancel.
El segundo escenario que plantea, implica aranceles mayores a 15 por ciento, lo que generaría una afectación sobre las exportaciones e importaciones nacionales.
Siller Pagaza señala que una parte de las importaciones de México dependen de las exportaciones, por lo que el déficit comercial podría alcanzar nuevos máximos históricos.
El tercer escenario, abunda, incluye aranceles superiores a 15 por ciento. En este caso se generaría un cambio estructural negativo para la economía nacional, por lo que el Producto Interno Bruto (PIB) podría caer alrededor de 1.5 por ciento en 2023 y no tendría la posibilidad de recuperarse rápidamente, a menos que el tipo de cambio rebasara la barrera de 23.5 pesos por dólar, lo que permitiría compensar el arancel e incentivaría de nuevo las exportaciones.
En el peor escenario posible, dice Siller Pagaza, Washington podría establecer aranceles de 25 por ciento, situación que sería equivalente a sacar a México del T-MEC.
En este caso, calcula, el PIB presentaría una caída de 3.5 por ciento el primer año, “pero a diferencia de otras recesiones tardaría varios años en recuperarse. Este escenario implicaría la pérdida del grado de inversión para la deuda soberana de México y fuga de capitales”, dice la especialista.