La petrolera italiana Eni anunció que abrió una cuenta en rublos para prevenir un posible corte al suministro de gas ruso, aunque aclaró que mantiene el rechazo a las condiciones impuestas por Moscú para mantener las operaciones en el mercado de hidrocarburos.
En un comunicado, la compañía aclaró que debido a que los plazos para el pago de suministro de gas vencen en los próximos días, inició el proceso de apertura de dos cuentas corrientes K en Gazprom Bank, con carácter preventivo.
Una de las cuentas se mantiene en euros y la segunda en rublos, aclara.
Eni tiene una participación estimada de 30 por ciento del Estado italiano, por lo que la decisión se tomó en conjunto con las instituciones pertinentes.
“Se tomó en cumplimiento del actual marco de sanciones internacionales y en el contexto de una discusión en curso con Gazprom Export para confirmar explícitamente que cualquier posible riesgo o costo derivado de este nuevo procedimiento de pago se asignará a Gazprom Export”, advierte.
En su comunicado, la empresa italiana recordó que Gazprom Export, así como las autoridades rusas confirmaron que la facturación y el pago seguirán realizándose en euros, pues las facturas se mantienen en esa moneda, como está establecido en los contratos.
En segundo término, Rusia estableció que un agente de punto de compensación que opera en la Bolsa de Valores de Moscú realizará la conversión a rublos dentro de las 48 horas posteriores, sin intervención del Banco Central de Rusia.
Sin embargo, la empresa, a petición de la Comisión Europea, aclaró con Gazprom Export desde el principio, que las obligaciones de pago se considerarán satisfechas después de la transferencia de euros, de acuerdo con lo establecido en el contrato y volverá a hacer la aclaración en cuanto abra las cuentas “K”.
Además, la compañía aclaró que el procedimiento no deberá tener impactos en costo y riesgo y no es incompatible con las sanciones que ha impuesto la Comisión Europea.
“La obligación de pago puede cumplirse con la transferencia de euros. Por lo tanto, la falta de pago por parte de Eni expondría a la Compañía al riesgo de violar su obligación de implementar de buena fe las solicitudes contractuales de Gazprom Export impuestas por sus propias Autoridades (al cual Eni no está sujeta); y una posible interrupción del suministro que podría poner en riesgo el incumplimiento de sus compromisos de venta con los clientes”, advirtió.
Analiza abrir un arbitraje internacional
Pese a que decidió abrir cuentas en rublos, la empresa italiana aclaró que si no hay respuestas completas y exhaustivas, basadas en el contrato por parte de Gazprom Export, Eni iniciará un arbitraje internacional basado en la ley sueca, que fue establecida en los acuerdos vigentes entre ambas partes, para resolver la incertidumbre sobre los cambios introducidos por el nuevo proceso de pago y la correcta asignación de costos y riesgos.
“En cualquier caso, Eni reafirma enérgicamente su intención de cumplir con cualquier posible disposición regulatoria futura que pueda sancionar el comercio de gas o sus contrapartes actuales”, advierte la empresa italiana.