(Juan Carlos Aldrete McCall, de Banorte; Carlos Hurtado, del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado, y Carlos Serrano Herrera, de BBVA México)
La política energética es un factor que impide que México aproveche las oportunidades del nearshoring que podrían poner el país en la misma posición de los países asiáticos al atraer la inversión extranjera directa que está perdiendo China, coincidieron analistas.
“Un factor que impide aprovechemos esto, es la política energética, porque hoy las empresas en el mundo requieren tener certeza de que van a tener acceso a electricidad, a precios competitivos y, además, no contaminante porque cada vez hay más presión de los gobiernos corporativos para que lo que sea que produzca una empresa, lo haga con energías limpias”, consideró Carlos Serrano Herrera, economista en jefe de BBVA México.
El especialista participó esta semana en la mesa “Perspectivas Económicas” de la Cumbre “Uniendo Mentes”, con la que COPARMEX CDMX festejó su 25 aniversario.
Serrano Herrera destacó que, gracias al nearshoring, la economía mexicana podría crecer hasta 4 por ciento.
“Si eso se hace, me parece que México podría estar atrayendo mucha mayor inversión. México podría crecer 1.8 puntos porcentuales más. Es decir, podemos pasar de ser un país que crece al 2, a uno que crece casi al 4 por ciento”.
En su participación, Serrano refirió que Taiwán y Singapur tuvieron una política de Estado para atraer inversiones.
“México hoy está ante una oportunidad donde podría llegar a tener crecimientos como ellos si hace bien las cosas. Y eso significa dar certidumbre jurídica a las empresas; eso significa dar certeza de que van a tener la infraestructura necesaria, invertir en educación, dar ventajas fiscales para que eventualmente pensemos que alguna de las fábricas de semiconductores, que por motivos geopolíticos están pensando migrar de Asia, puedan instalarse en México. Creo que se puede, pero tenemos que hacer una política industrial conjunta entre el sector público y el privado”, expresó.
Al respecto, Janneth Quiroz Zamora, directora de Análisis Económico, Cambiario y Bursátil de Grupo Monex, advirtió que México debe prepararse para atender el fenómeno del nearshoring porque es un suceso de mediano plazo que debe ser atendido con recursos naturales, de infraestructura y humanos para poder ser aprovechado en su totalidad y, en términos administrativos, como permisos y trámites, todo ello para facilitar que la inversión se establezca a lo largo del país.
(Janneth Quiroz Zamora, de Grupo Monex)
Por su parte, Carlos Hurtado, director general de Centro de Estudios Económicos del Sector Privado, dijo que el reto de México es que su economía se acerque al nivel de sus socios comerciales en América del Norte, esto es, Estados Unidos y Canadá, e indicó que debe ser con el mejoramiento en la infraestructura carretera, mayor seguridad en los caminos y las ciudades y la seguridad que da un Estado de Derecho “bien y justamente aplicado”.
En su oportunidad, Juan Carlos Aldrete McCall, director ejecutivo de Análisis Económico y Estrategia Financiera Banorte, expuso que hay tres aristas principales que México debe atender “forzosamente”. Estas son la inversión en capital humano, la inversión en capital físico y la inversión en bienes públicos.
“(Esto) para poder tener un efecto multiplicador sobre la economía y movernos más arriba en la cadena de valor en sectores tan importantes como podría ser el de semiconductores, por ejemplo, que México desafortunadamente hoy no cuenta con las condiciones para efectivamente poder capitalizar esto de la manera en que podríamos hacerlo”, lamentó.