El sector energético se encuentra en constante cambio, y la disrupción actual brinda un escenario de retos y oportunidades para las empresas de la industria.
La descarbonización, la digitalización, las presiones de los costos y la incertidumbre geopolítica son solo algunos de los factores que transforman el mercado de la energía y los recursos.
Ante este escenario, EY, firma líder en servicios profesionales de auditoría, impuestos, consultoría, estrategia y transacciones, presentó un análisis en donde señala los principales retos que este 2023 podría enfrentar el sector energético.
En ese sentido, Bernardo Cardona, Socio Líder Adjunto de Energía para EY Latinoamérica Norte, consideró importante que las compañías de energía definan y comuniquen de manera efectiva sus planes de descarbonización, desarrollo de nuevos negocios y productos.
“Estos elementos son una defensa ante disruptores del mercado, así como sus acciones que mejoran la eficiencia operativa por medio de tecnologías y digitalización”, dijo.
El especialista agregó que las compañías deben trabajar para incluir la planificación de escenarios, portafolios optimizados, cadenas de suministros transparentes y colaboraciones.
Desafíos por cada segmento de la industria energética
Dentro de Oil & Gas, el principal desafío en el proceso de exploración y descubrimiento (Upstream) es que los ganadores de bloques de Energía y Petróleo (EyP) continúen con los esfuerzos para valorar el potencial de explotación de los campos asignados.
Aunado a ello, el proceso de transporte y almacenamiento (Midstream) presenta retos para los operadores de infraestructura como asegurar el cumplimiento regulatorio y normativo, así como buscar el involucramiento de Petróleos Mexicanos en sus proyectos.
Por lo anterior, recomendaron blindar sus operaciones para reducir el riesgo de interrupción de la continuidad operativa.
Mientras que, dentro de la refinación y distribución a usuarios (Downstream), los gasolineros deben desarrollar una serie de estrategias de diferenciación que les permitan incrementar márgenes e ingresos por metro cuadrado.
Por lo que tendrán que implementar iniciativas específicas de experiencia al cliente, digitalización, promociones, fidelización y lealtad, combustibles alternativos, apalancamiento del binomio tiendas de conveniencia-estaciones de servicio, desarrollo de nuevos negocios non-fuel/non-oil, y estaciones de servicio sustentable.
El desafío para el segmento de Utilities está en mejorar la eficiencia operativa y optimizar las unidades de producción; para ello, se recomienda apalancar y desarrollar soluciones digitales que permitan la mejora de la eficacia en las operaciones.
Lo anterior, conlleva a los subsegmentos de generación, transmisión y distribución y comercialización, a ejecutar proyectos de expansión y de mejora de la eficiencia de la red, además de automatizar y digitalizar las operaciones para lograr mayor eficiencia.
Finalmente, los especialistas coincidieron en que dentro del sector de Minería el principal reto es referente a las compañías mineras en fase de exploración, ya que tendrán que continuar con los esfuerzos de la valorización del potencial de los yacimientos y mantener la licencia para operar.
En cuanto a las compañías que se encuentran en fase de producción, deben automatizar y digitalizar las operaciones para lograr mayor eficiencia operativa, y, por otro lado, definir y ejecutar una estrategia, hoja de ruta y acciones de descarbonización y de impacto social.