La digitalización gubernamental es un factor que puede ayudar a reducir las emisiones de CO2 en las ciudades, y además genera beneficios alternos, como una mayor recaudación, eficiencia y recaudación, aseguró María José Salcedo, coordinadora de la Oficina de la Fundación Friedrich Naumann para la Libertad.
Durante su participación en el Foro Forbes, Economía Verde y Desarrollo Sustentable 2022, la especialista aseguró que la digitalización de los trámites burocráticos en las ciudades permite reducir los traslados de los ciudadanos a las oficinas de gobierno, así como a evitar el uso de papel, lo que disminuye la huella de carbono en las actividades gubernamentales.
La especialista puso como ejemplo el programa Visor Urbano, que empezó en Guadalajara, de la mano de Bloomberg Philanthropies, que permite ver a las personas interesadas en abrir un negocio, un mapa que detalla los giros que hay en cada zona de la ciudad para tomar decisiones sobre las posibilidades de éxito.
Apropiación de los espacios
Para África Rubio, directora de Sustentabilidad de Cushman & Wakefield, las ciudades inteligentes no se limitan al aspecto medioambiental, pero es necesario integrar enfoques como la movilidad, la accesibilidad social, justicia, transparencia y las reglamentaciones de una ciudad.
El reto más grande, dijo en su participación en el panel Forbes talks: Smartcities libres de CO2, es involucrar a todos los que usamos las ciudades: involucrar al sector privado, al sector público y a los ciudadanos.
Por ello, consideró que otro reto para el desarrollo de ciudades inteligentes es conjuntar a todos los integrantes de las urbes.
En este sentido, José Raúl Pacheco Carranco, director de Desarrollo de Vivienda Sustentable y Diseño de la Comisión Nacional de Vivienda, aseguró que es necesario construir las ciudades desde las personas, basado en sus necesidades y generar la apropiación de espacios, lo que genera un mayor involucramiento de la ciudadanía en el desarrollo de los espacios públicos y privados.