Los precios del petróleo cerraron la mitad de la semana con avances, incluso con panoramas contrastantes que enfrentan la posibilidad de la escasez del insumo, con incrementos en la producción de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y de Rusia.
El West Texas Intermediate (WTI), el petróleo de referencia en Estados Unidos, acabó el día con un avance de 1.28 por ciento, para ubicarse en 87.64 dólares por barril, mientras que el Brent avanzó 0.9 por ciento, hasta 93.17 dólares por barril.
En la sesión hubo información contrastante, que en suma, alentó el precio del barril en los mercados internacionales.
De acuerdo con Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base, las presiones al alza ocurrieron debido a que la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés), informó que en la semana anterior hubo una fuerte reducción en los inventarios de petróleo.
De acuerdo con la EIA, en ese lapso los inventarios se redujeron 7.1 millones de barriles, hasta 425 millones, en comparación con las previsiones en las que se esperaba un aumento de 800 mil barriles.
El organismo dependiente del Departamento de Energía de Estados Unidos mostró que las exportaciones de petróleo alcanzaron cinco millones de barriles diarios, la cifra más alta desde que se tiene registro, mientras que las existencias de gasolina se redujeron 4.6 millones de barriles, por lo que la demanda por petróleo y sus derivados es fuerte.
Además, en otras latitudes, el secretario general de la OPEP, Haitham Al-Ghais, mencionó que los mercados mundiales se enfrentan a un alto riesgo de escasez debido a que la demanda se mantiene fuerte.
El líder petrolero insistió que los temores en torno a la desaceleración del consumo en China y el resto del mundo han sido exagerados. De acuerdo con Al-Ghais, la demanda por petróleo aumentará en casi tres millones de barriles diarios este año.
Para compensar la escasez, el secretario general de la OPEP señaló que el grupo ampliado tiene la capacidad de producir entre dos y tres millones de barriles diarios adicionales, por lo que decidieron incrementar su producción conjunta en 100 mil barriles, aunque es necesario racionar sus reservas de producción, las cuales están “severamente limitadas”.
El funcionario de la OPEP dijo que la caída en las reservas es consecuencia de años de inversión insuficiente en la industria petrolera global, lo que incluye la construcción de refinerías y otro tipo de infraestructura.
Por otra parte, aseguró que incluso con la oferta adicional que podría venir de un acuerdo nuclear con Irán, el mercado tiene la capacidad de absorber este flujo.
Asimismo, Siller Pagaza mencionó que en la sesión surgieron datos que apuntan a un incremento en la producción petrolera rusa, pues la demanda de Asia se incrementó y ha permitido compensar la reducción de los pedidos europeos, a raíz de las sanciones implementadas por Europa ante el inicio de la guerra con Ucrania.