La Comisión Federal de Electricidad (CFE) informó sobre la colocación de la segunda emisión de bonos sustentables por 1,500 millones de dólares (mmdd) en dos tramos, con vencimientos respectivos a enero de 2030 y a enero de 2035.
La empresa refirió que la demanda superó en 6.5 veces el monto emitido, por lo que se alcanzó una demanda máxima de 9.7 billones de dólares.
“La elevada demanda de los bonos de CFE por los inversionistas permitió ajustar el precio sobre los niveles indicativos iniciales, lo que representa un ahorro financiero superior a la última emisión realizada en este mismo formato en 2022, confirmando el interés de los inversionistas institucionales globales por instrumentos de inversión con riesgo México”, explicó en un comunicado.
Agregó que esta colocación presentó un récord en la eficiencia de los márgenes al registrar el menor nivel de los últimos tres años en relación con la curva del soberano en dólares.
La Comisión, bajo la Dirección General de Manuel Bartlett Díaz, refirió que la distribución de los montos en cada tramo y su tasa de interés se dio de la siguiente manera:
- Tramo a 5.3 años: asignación de 500 mmdd a un cupón de 5.70 por ciento, con una compresión de 40 puntos base (pbs) respecto a la oferta inicial.
- Tramo a 10 años: asignación de 1,000 mmdd a un cupón de 6.45 por ciento, alcanzado una reducción en el spread de 45 pbs respecto a la oferta inicial.
Añadió que los ingresos netos de la emisión se utilizarán para refinanciar los créditos bancarios de corto plazo existentes en condiciones financieras onerosas y aclaró que esto no le representa deuda adicional.
Compromisos adquiridos
La CFE señaló que los bonos emitidos se estructuraron bajo un formato sustentable, el cual contó con la opinión favorable de la empresa internacional especializada en materia ASG MORNINGSTAR Sustainalytics, de manera que se compromete a financiar o refinanciar por un monto equivalente diferentes acciones y proyectos verdes y sociales, de conformidad con su Marco de Financiamiento Sostenible.
Además, indicó que se compromete a utilizar los recursos de la emisión para el financiamiento de acciones y proyectos de inversión y actividades de energías renovables y eficiencia energética, así como para la provisión de servicios de carácter social, a efecto de contribuir con la aceleración de la transición energética, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y la inclusión social, de conformidad con los objetivos y metas del Plan de Negocios 2024-2028.
Por último, reveló que la emisión contó con calificación BBB emitida por S&P Global Ratings; Baa2 por Moody’s, y BBB- por parte de Fitch Ratings. Los coordinadores globales de la transacción fueron Bank of America, HSBC, Citi, Mizuho y BBVA, mientras que BNP Paribas, Santander, Scotiabank y SMBC actuaron como bancos colocadores (Joint Bookrunners). El agente estructurador de los bonos sustentables fue Scotiabank.